Florida.– El AR-15 ha aparecido en algunas de las balaceras más notables de la memoria reciente. James Holmes usó un AR-15 para asesinar a 12 personas y herir a 70 en una sala de cine en Aurora, Colorado, en 2012.
Lo mismo hizo Adam Lanza, quien masacró a 26 estudiantes y profesores en el establecimiento Sandy Hook Elementary School en Newtown, Connecticut, el mismo año. Y, por supuesto, Omar Mateen, de 29 años, portaba un revólver y un AR-15 en Pulse, el club donde realizó el tiroteo el fin de semana pasado. El ataque en Orlando desencadenó demandas de prohibición de ventas de rifles de tipo militar y reducción de los tiros.
