Este es un país, que al decir de nuestros abuelos, “el que no corre vuela”, porque nadie se sorprende de que ocurran cosas, que en otras sociedades son inimaginables.
Desde hace varios años, aunque usted no lo crea, se lucha a nivel de la justicia para que sean devueltos miles de metros cuadrados pertenecientes al complejo deportivo de La Barranquita, de Santiago, sustraídos por particulares.
Los sometimientos a los invasores de esa propiedad, iniciaron en la gestión como secretario de Deporte, de Jaime David Fernández.
Sin embargo, pasaron varios años, sin que la justicia moviera un dedo para enmendar esa barbaridad, y lo denominó así, porque solo en un país como el nuestro, se cometen hechos de esa naturaleza, sin que sobre los culpables caiga todo el peso de la ley.
Pero que nadie se ponga las manos sobre la cabeza, ya que en otras dependencias estatales que administran terrenos del estado, se han producido casos mucho más bochornosos que el de La Barranquita, y tampoco se ha hecho absolutamente nada. Parecería un verdadero relajo.
Por eso, llama la atención que la actual gestión del ministerio de Deportes, informó esta semana, que ha recuperado miles de metros cuadrados que son usufructuados desde hace años por particulares.
Ojalá, que esas captaciones se aceleren, porque es inconcebible que una propiedad de la importancia de ese complejo, esté a merced de invasores profesionales.
El deporte, es una actividad de vital importancia en cualquier sociedad, por lo que hay que protegerlo al máximo.
Por esa razón, felicitamos al ministerio de Deportes, que ha retomado la protección y recuperación de los bienes de ese complejo ante la embestida de malhechores.