Especialistas dominicanas urgen por la implementación del sistema de banco y del laboratorio a favor de los pacientes. archivo.
SANTO DOMINGO.-En la República Dominicana urge que el sistema de salud establezca un banco para tejidos y un laboratorio de histocompatibilidad con miras a fortalecer la donación y trasplante de órganos.
Países como Chile, Uruguay, Argentina y Puerto Rico tienen ambas unidades dentro de los ministerios de Salud, con las cuales garantizan que los órganos y tejidos donados para los pacientes en lista de espera puedan obtenerlos en óptimas condiciones.
¿Un banco para qué?
Al cuestionar a Fernando Morales Billini, director del Instituto Nacional de Coordinación de Trasplantes (Incort), sobre la necesidad de un banco para tejidos y un laboratorio de histocompatibilidad, explica que el primero permitiría la recolección, procesamiento, almacenamiento y distribución de tejidos humanos en condiciones óptimas, tales como huesos, tendones, córneas, válvulas cardiacas, segmentos, vasculares, piel y otros.
Para que se tenga una idea de lo que explica Morales, solo en el Centro Cardio-Neuro-Oftalmológico y Trasplante (Cecanot) se han realizado 821 de córneas (tejidos), de los cuales el 91 por ciento fueron adquiridas en el extranjero, es decir 703 fueron importadas.
En cuanto al laboratorio de histocompatibilidad, sostiene que este proporciona los datos necesarios para evaluar el riesgo inmunológico del paciente que será sometido al procedimiento.
Apunta que con el personal adecuado se puede utilizar la morgue como lugar primario para obtener estos tejidos humanos.
“La importancia de esto en los programas de trasplante de órganos sólidos es llevar a cabo la tipificación de antígenos HLA, para determinar el grado de compatibilidad que exhibe donador/receptor para realizar el trasplante”, expone Morales Billini.
A nivel privado
La histocompatibilidad solo se realiza en la Plaza de la Salud, en la Fundación Baquero y en el Hospital Metropolitano de Santiago (Homs), y es costeada por quien espera la donación. Su precio en el país supera los 30 mil pesos y en su defecto puede ser enviado al extranjero, pero sale más costoso.
Seguridad Social
Dentro de los trasplantes que se realizan en la nación solo el de tipo renal tiene cobertura total en cuanto a la Sistema Dominicano de Seguridad Social. Los demás, como el de hígado, corazón, pulmón y médula ósea no están incluidos en el Plan Básico, por lo que los pacientes y sus familiares deben pagar los gastos que incurren en elpreceso de su realización.
Desde 2015 el Consejo del Sistema Dominicano de la Seguridad Social dispuso que los afiliados tengan una atención integral, con un tope de cobertura de hasta un millón de pesos por evento por año.
Esto incluye la preparación, realización de trasplante, extracción de riñón de donante vivo o cadavérico, seguimiento y otros.
La espera
Un laboratorio de histocompatibilidad es fundamental para realizar los trasplantes, principalmente renal, médula ósea y corazón, entre otros.
Pero la baja donación de órganos, principalmente de donantes cadavéricos, trae como resultado la subitlizacion de ese laboratorio, lo que eleva los costos operacionales del mismo.
Por eso el año pasado hubo una caída significativa del procesamiento de nuevas muestras.
Desde el Hospital General Plaza de la Salud, además de realizar trasplante, también se da el soporte a los demás programas autorizados por el Instituto Nacional de Coordinación de Trasplante.
Pero hace falta es un banco de tejidos para a pacientes necesitados de huesos, piel, cartílagos y otros.
Luisa lleva tres años con un hígado nuevo
Testimonio. A menos de dos meses de fallecer su madre en su natal Monte Plata, Luisa María Figaris se enteró que padecía de hepatitis autoinmune, la cual degeneró en falla hepática y le dañó su hígado. Cuando supo de su condición de inmediato pensó que “se le había acabado el mundo”.
En medio de todas esas situaciones y los distintos análisis que empezó a realizarse se enteró que ella calificaba para un trasplante de órgano.
Su reto era buscar un millón y medio de pesos, así que empezó a tocar puertas para pedir ayuda.
En su búsqueda se tropezó con algunos inescrupulosos que la llamaron y le decían por la vía telefónica que pagarían el trasplante, así que la citaban y cuando ella iba resultaba ser todo una vil mentira.
Pese a esto, Figaris nunca perdió la fe y relata que gracias al transportista Juan Hubieres, al senador Charlie Mariotti, de la provincia Monte Plata, y otras personas que la ayudaron pudo pagar su trasplante de hígado.
Figaris tiene tres años de haberse trasplantado en la Plaza de la Salud, único lugar que realiza este proceso en el país y que hasta la fecha ha practicado 39 de ese tipo.
La joven dio testimonio de que las familias pueden salvar las vidas de sus propios parientes o desconocidos que luchan por una segunda oportunidad.