Hugo López Morrobel
Tras el anuncio de integración de Chris Duarte, de los Pacers de Indiana a la selección de baloncesto de República Dominicana, con mira a la ventana clasificatoria rumbo al Mundial, muchos fanáticos “saborean” la posibilidad de que una decisión similar la adopte el veterano Al Horford, quien de hacerlo se convertiría en una pieza de suma importancia.
Sin embargo, esa es una posibilidad que por el momento luce muy remota, porque hasta el momento el jugador de los Celtics no ha mostrado interés, por lo menos en público, a pesar de los “pedidos y ruegos” que en ese sentido han efectuado los directivos de la Federación.
Considero que a Horford hay que “trabajarlo” a fondo, y hacerle saber que la población reclama por unanimidad su integración, una forma de motivarlo hasta en términos patrióticos.
Si las explicaciones y motivaciones en ese sentido no dan resultados, que se olviden de eso, definitivamente.
Es más, creo que si en ese esfuerzo directo con Al no se logran buenos resultados, recurrir para que intervengan sus progenitores Arelis Reynoso y Tito Horford, y por qué no, a su esposa Amelia Vega.
Quizá es mucho pedir, pero hay que convencerlo de que es una pieza clave para el país.
Mientras tanto, la iniciativa que con tanta firmeza ha demostrado Chris Duarte hay que tomarla como una forma de expresar su agradecimiento a la patria que lo vio nacer y crecer.
Para los que no están al día, la República Dominicana se medirá a Panamá el 25 de agosto, en el Palacio de los Deportes de Santo Domingo, y cuatro días después, el lunes 29, jugará en Caracas, frente a la selección venezolana, y de ahí seguirá rumbo a Brasil a la Copa de las Américas.
Es decir, serán tres jornadas bastante competitivas para la selección nacional, donde se requerirá de sus mejores hombres.
RADARES.- Con los triunfos obtenidos en importantes eventos internacionales, la dirigencia deportiva no se puede “dormir” en sus laureles, porque ese sería un grave error, teniendo en cuenta que la gente se acostumbra a los triunfos, y retroceder un ápice constituiría una verdadera catástrofe para ellos y el país.
Y es que, las victorias siempre son bienvenidas, pero siempre es bueno tener presente, que no hay peor medicina que dar cambios de reversa… Las negociaciones sobre el draft internacional, entre las Grandes Ligas y el sindicato de peloteros, parece que será largo y tendido.
