Santo Domingo.-Parece irónico creer que “Chichío”, quien siempre anda con ropa sucia y maloliente, vive en la avenida John F. Kennedy esquina Abraham Lincoln.
Pero sí, ahí vive, no en una de esas torres lujosas cercanas al área, sino justo debajo del elevado que comparten ambas avenidas.
Trapos sucios y cartones viejos decoran su “humilde hogar”, en donde también se baña con unos short en medio de la indiferencia de las personas que por allí transitan.
Él es uno de los más de 800 mil indigentes que viven en las diferentes avenidas de República Dominicana, porque carecen de todo. Ese dato, según un estudio publicado en 2011 por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo.
“Creatividad”
Y es que los elevados del Distrito Nacional y otras áreas, como parques y avenidas, han sido convertidos por indigentes, y en muchos casos por los denominados “palomos”, en casas improvisadas, todo eso sin que ninguna autoridad pueda controlarlos.
Ellos duermen a plena luz del día sin importar ruidos, contaminación ni mucho menos que por su “ventana” entren los rayos del sol, nada de eso les molesta. Muchos de ellos cocinan y se asean en las vías públicas como si fuera algo normal.
Colchones y sábanas sucias, anafes, ropa, cartones viejos y mucha basura son algunos de los adornos que decoran las improvisadas casas en que viven esos indigentes
“Primer gandul”
Eran alrededor de las 11 de la mañana cuando reporteros de EL DÍA llegaron a la intersección de las avenidas John F. Kennedy y Abraham Lincoln, mientras dos hombres y una mujer dormían como “el primer gandul”.
“Levántense que les están haciendo fotos”, vociferó uno de los “limpiacristales” del área. Al despertarse, dos de ellos empezaron a vociferar palabras obscenas a los reporteros y también a amenazarlos.
Una costumbre…
Pero la cosa no se queda ahí. Situación similar se pudo observar debajo de otros elevados de la Capital, donde el mal olor y la inmundicia se han adueñado de esos lugares.
Por ejemplo, en la San Martín, cinco ancianos viven, duermen y hasta cocinan debajo del elevado que cruza por esa avenida.
“Ellos los domingos cocinar aquí, reúnen leña y hacen cualquier cocinao’ ahí. Nadie se mete en eso, porque son muy ancianos, imagínate no tienen a nadie”, dice un joven que trabaja cerca del área.
Agentes del Ayuntamiento del Distrito Nacional han acudido hasta el lugar y lo han limpiado, pero más tarde vuelven los ancianos a acomodarse en su improvisada casa.
Esos envejecientes, la mayoría con más de 65 años, son celosos con su espacio. No permiten que ningún desconocido invada lo que ellos consideran su lugar.
En la Ortega!!!
En el elevado de las avenidas Kennedy con Ortega y Gasset también viven indigentes.
En esa área el mal olor a heces fecales y orina también es insoportable. Los indigentes que allí duermen salen en la mañana, muchos a limpiar cristales y otros a pedir en las calles, pero al caer la noche vuelven a “sus hogares”.
Asimismo, en el elevado que está casi frente al canal 2, Teleantillas, aunque no había una persona acostada, está instalado un colchón sucio, con todo y sábana.
El problema de todos estos indigentes es que aunque las autoridades recojan todas sus pertenencias y limpien el área, ellos vuelven a instalarse, pues nadie ha podido controlarlos.