Miami.– La organización Trump vendió en 2015 unos terrenos en República Dominicana a una compañía costarricense ligada a unos venezolanos estrechamente “asociados” a Diosdado Cabello, número dos del chavismo y sujeto a sanciones por parte del Gobierno de EE.UU., informó este martes The Miami Herald.
El diario del grupo McClatchy, que accedió a expedientes judiciales sobre esta operación realizada antes de que Donald Trump fuera presidente, señala que “no hay pruebas de que la Organización Trump incurriera en ilegalidad alguna».
Sin embargo, señala que la venta llama la atención hoy en día, dado que el presidente Trump está librando un pulso con Nicolás Maduro y acusa a las anteriores administraciones de EE.UU. de no haber hecho nada para evitar que los chavistas se afianzaran en el poder en Venezuela.
Trump no reconoce a Maduro como presidente de Venezuela y fue el primer gobernante en apoyar a Juan Guaidó, titular de la Asamblea Nacional, cuando, invocando la Constitución, se proclamó mandatario interino en enero pasado.
La transacción se realizó en abril de 2015, dos meses antes de que Trump anunciara que se postulaba a la Presidencia.
La vendedora fue Caribusiness Investments, parte de la Organización Trump, y la compradora fue la compañía Multiservicios Shape de Costa Rica S.A., según los registros de la propiedad de ese país.
The Miami Herald asegura que Multiservicios Shape comparte muchos ejecutivos con otra compañía costarricense llamada Tu Andamio S.A. creada en 2013 y controlada por la venezolana Marlene Coromoto Arenas Colina, esposa de Pedro Fritz Morejón, que fue ministro de Turismo cuando Hugo Chávez era presidente (1999-2013).
Se desconoce el precio pagado, pero el Miami Herald dice que, según la información difundida públicamente en 2016 por Trump acerca de sus negocios, Caribusiness Investments ganó dos millones de dólares en 2015 con la venta de terrenos.
De acuerdo con el diario, Multiservicios Shape está ligada a personas del entorno de Diosdado Cabello, a quien el Gobierno estadounidense acusa de narcotráfico y lavado de dinero y sobre el que pesan sanciones del Departamento del Tesoro desde 2018.
Según los documentos a los que tuvo acceso The Miami Herald, cuando la compañía de Trump se metió en un proyecto de desarrollo inmobiliario en República Dominicana denominado Cap Cana, donde iba a construir un conjunto de villas de lujo, “su familia sabía que dependía de fuertes inversiones procedentes de Venezuela».
“El proyecto dominicano es otro ejemplo de lo poco que se sabe públicamente de algunos emprendimientos en el extranjero de la Organización Trump y de los conflictos potenciales que pueden suponer para la política de Estados Unidos”, dice el diario.
Ni el vicepresidente ejecutivo y jefe jurídico de la Organización Trump, Alan Garten, ni el abogado dominicano Alejandro Peña-Nieto, que fue autorizado por la compañía Caribusiness a vender la propiedad, quisieron responder a las consultas del diario.
Consultados por el Miami Herald, varios costarricenses y algunos venezolanos relacionados con Multiservicios Shape dijeron no saber nada o no recordar los detalles de la operación. Los terrenos vendidos a la compañía costarricense le fueron otorgados a la Organización Trump como parte de un arreglo judicial con los desarrolladores de Cap Cana, a los que había demandado por no recibir unos pagos.