El gobernador de la provincia oriental afgana de Logar, Arsala Jamal, murió al estallar una bomba escondida en un micrófono.
Jamal estaba pronunciando un discurso a los fieles en una mezquita por la fiesta musulmana de Eid al-Adha cuando el dispositivo detonó y le causó la muerte instantánea.
Los analistas dicen que Jamal era un blanco de alto perfil para los extremistas, ya que era un hombre de confianza del presidente Hamid Karzai y trabajó como su jefe de campaña en las elecciones de 2009.
Karzai condenó el atentado y dijo que el ataque contra una mezquita durante la celebración del Eid sólo demuestra que el Talibán es enemigo del Islam y de la Humanidad.
Nadie se atribuyó de inmediato la autoría del ataque.
El Talibán ha aumentado su fuerza Logar -al sur de la capital, Kabul- que, junto con su vecina provincia de Wardak, se ha convertido en los últimos años en un territorio sin control ni ley, según comenta el corresponsal de la BBC en Kabul, David Loyn.