SANTO DOMINGO.-En los adultos mayores se ha comprobado que los síntomas del Covid-19 se están presentando de forma totalmente diferente a las tradicionales manifestaciones de fiebre, tos y dificultad respiratoria.
De acuerdo a la psiquiatra geriatra, Deisy Acosta, en algunos pacientes mayores de 60 años el coronavirus se está presentando con estados de confusión agudos, diarrea y alteración de la conciencia, razón por la que instó a los cuidadores a prestar suma atención para evitar catástrofes.
La causa de este fenómeno aun es desconocida por los expertos, ya que el virus es nuevo y sigue siendo objeto de estudio.
En el país la letalidad del Covid-19 en este segmento poblacional se coloca en 15% de los casos que hasta el 22 de abril eran 1,094, de los cuales 160 fallecieron.
A juicio de la especialista, existen tres causas por las cuales ellos son más vulnerables al virus, la primera es que en el envejecimiento el sistema inmunológico pierde fuerza, respondiendo débilmente ante ataque de virus y bacterias.
Otra razón que explica es este público en su gran mayoría padece de enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión y enfermedades pulmonares, condiciones que incrementan el riesgo de complicación y muerte por Covid-19.
Y finalmente la exposición al contagio es mayor en ellos, porque la alteración del estado cognitivo, la demencia y la pérdida de memoria son mayores en esa población, por lo cual se les hace difícil aplicarlas medias de protección correctamente.
“A los adultos mayores se les dificulta adaptarse a los cambios, por lo cual aplicar las medias de distanciamiento social es más difícil en esta población, sobre todo si tienen trastorno de memorias, pues usar mascarillas y lavarse las manos se les olvida con mucha facilidad”, explicó.
El riesgo de caer en un estado de confusión agudo en un envejeciente se incrementa durante el paso de la pandemia, pues al entender de Acosta, el uso de las mascarillas y otras medidas de protección les causa turbación y desesperación.
Advirtió que los cuidadores deben tener especial manejo de aquellos ancianos que ameriten permanecer asilados, ya que la falta de socialización aumenta el riesgo de deterioro de la mente.
Dijo que tiene reporte de cuidadores que llevan una carga emocional y financiera muy fuerte, luego de la crisis, pues muchos han perdidos sus empleos o sus recursos económicos esta mermados.
En el país la población mayor de 65 años, que supera el 1.7 millones de habitantes, el 11,7% padece de demencia y los que padecen ansiedad representan el 8.9%, según el Análisis de Situación en Salud Mental y Atención Primaria en República Dominicana, coordinado por el Ministerio de Salud Pública en 2018.