José Alfredo Corripio, José P. Monegro, Nelson Arroyo y Luis Abinader conversan tras participar en los Coloquios de EL DÍA. JOSÉ DE LEÓN
SANTO DOMINGO.-“Mientras llega el mesías aquí estoy yo”.
Así les dice Luis Abinader a las organizaciones de la sociedad civil y los partidos emergentes que tienen requerimientos específicos y absolutos sobre el modo en que un nuevo gobierno debe dirigir los destinos de la nación.
Tras decir que lo que es urgente para el país es salir del Partido de la Liberación Dominicana por su modelo clientelar y corrupto, declaró que “dejando de lado un poco la modestia, nadie se ha preparado como nosotros para gobernar a la República Dominicana”.
Informó que ha agotado una agenda de reuniones con todos los sectores de la sociedad dominicana y que aquellos que quieren cambio y un país diferente le van a apoyar.
Reconoció que ese apoyo no será unánime “porque eso nunca ha pasado”.
Gobierno sin sobresaltos
Abinader, que busca la presidencia de la República por tercera ocasión, aseguró que gobernará sin traerle sobresaltos a ningún sector.
Se comprometió a desarrollar un gobierno que respete la continuidad del Estado manteniendo todas las obras y proyectos que hayan desarrollado los presidentes anteriores y que sean de beneficio para la población.
“Tanto la Iglesia, —dijo Abinader— como los empresarios, los sindicatos, los sectores populares saben como pienso, mi propuesta es transparente”.
Intensa jornada
El aspirante presidencial aseguró estar agotando una agenda que le ha llevado a recorrer todo el país, moviéndose entre los distritos municipales y los municipios de cada provincia.
Esta jornada ha involucrado a los miembros de su familia.
“No solo mi esposa y mis tres hijas, también mis hermanos, todos están apoyándome y han hecho grandes sacrificios”.
Debido a la intensidad de la campaña, se vio en la obligación de someterse a un régimen de cuidado físico para garantizarse la salud. “A pesar de eso lo que más cuido es la salud mental, eso es lo que trae tranquilidad y cuando tienes una familia estable te sientes mucho mejor”.
Ascenso político
Para Abinader la trayectoria es importante.
“Si tu carrera empezó arriba obviando procesos, todo el sacrificio que tengas que tomar será difícil de sobrellevar”, señaló.
Narró parte de los inicios de su carrera política, indicando que muchas veces al llegar a un lugar solo habían cinco personas esperándole y que en muchos casos no le conocían.
Contó que aunque las cosas han cambiado notablemente desde entonces, todavía se mantiene trabajando como si fuera un desconocido.
“Cuando una encuesta me favorece, trabajo igual que cuando no me favorece”.
Como norma mantiene un consejo que recibió de un amigo politólogo que no identificó. “Ese amigo me dijo que cuando se está ascendiendo en el poder político es cuando uno debe prepararse para descender, porque el que no lo hace tiene problemas”.
Resistencia
Estar continuamente expuesto al escrutinio público y a las críticas es parte del precio que paga cualquier aspirante a un puesto electivo. Al respecto, Abinader reconoció que nunca se está blindado para los ataques y que la diferencia está en la forma en que se asumen dichas embestidas.
“El que no tenga pasión por un país diferente es difícil que pueda resistir este activismo político”.
Los ataques muchas veces vienen del mismo partido.
Sin embargo, Abinader afirmó que nunca tuvo problemas con los denominados ‘viejos robles’ de quienes dice que siempre le respetaron. “Cuando llegaban a una actividad, yo me paraba y les daba la silla, solo por citarte un ejemplo”, señaló.
Cree que esa relación de respeto mutuo también le abrió las puertas con los más jóvenes.