En Centro y Norteamérica y algunos lugares más, se celebra el 14 de febrero como día del amor y la amistad desde el punto de vista laico, también llamado Día de San Valentín, que comenzó siendo una festividad cristiana.
Existen varias leyendas acerca de este día. Una de ellas data del siglo III y cuenta que el emperador Claudio II prohibió los matrimonios de los jóvenes con la intención de que fueran soldados.
Un sacerdote llamado Valentín no estaba de acuerdo con esa medida y los casaba en secreto, por lo que al ser descubierto, fue mandado a ejecutar un 14 de febrero del año 270. Le llamaron luego, santo.
A partir de mediados del siglo pasado, se comenzó a celebrar este día, intercambiando regalos y tarjetas.
Es un día en que se celebra el amor.
Muchos filósofos, poetas y pensadores han escrito sobre el amor. Personalmente, me identifico con algunas frases escritas por ellos. Víctor Hugo escribió “Amar es decir te amo sin hablar”. Jorge Bucay: “El verdadero amor no es otra cosa que el deseo inevitable de amar al otro para que sea quien es”. Pablo Neruda “En un beso sabrá todo lo que he callado”.
No hay que subir al Monte Fuji tocando las campanas tres veces para pedir amor eterno, como hacen las parejas japonesas ese día. Basta con amar cada día a su pareja, considerarla, tenerla presente siempre y agradarla sin esperar el 14 de febrero.
Celebre cada día su amor como si fuera San Valentín.