Hay muchas cosas que pudiera decir de estos 20 años en la casa que lleva por nombre EL DÍA. Sin embargo, no hablaré de los logros que ha tenido este matutino gratuito, que son muchos, ni de las noticias que compartimos a diario con nuestros lectores, ni siquiera del crecimiento y aprendizajes propios que me ha regalado cada día vivido en este diario.
En estas líneas de hoy quiero darles las gracias a mis compañeros, los que se han ido y los que han permanecido en esta casa. Sí, casa porque el trabajo es espacio donde pasamos la mayor parte del tiempo y ellos, con sus diferencias y fortalezas, son la familia que nos da la profesión que elegimos.
Ellos son los que en los momentos difíciles nos tienden una mano, nos escuchan y hasta nos ayudan a superarnos y mejorar. Siempre habrá malos, regulares, buenos o mejores.
Con unos tendremos más cercanías que con otros, es cierto, pero cada uno de ellos aporta su granito de arena en el día a día que nos toca laborar.
Los 20 años en el periódico El Día me han regalado la cercanía de tantas maravillosas personas. Y no hablo solo de mis compañeros periodistas, me refiero a todos los que, de una manera u otra, se relacionan a nuestro trabajo, como el personal de Seguridad y Limpieza, de Recepción, de la Central Telefónica, Archivo, Cooperativa, Administración, Mercadeo, Ventas y Publicidad y muchos más.
Si nos detenemos un momento, nos daremos cuenta que todos somos piezas importantes para que un producto llegue a su destino final o una empresa prospere.
Gracias a nuestros compañeros nuestras horas de trabajo pueden ser pesadas o ligeras. Con ellos avanzamos o nos quedamos atrás.
Es importante que logremos entender que cada uno de ellos tiene una manera positiva o negativa de incidir en nosotros y nosotros en ellos.
Si sabemos esto, podremos ser más cuidadosos con ellos y el ambiente se tornará más familiar, ligero y, por qué no, feliz.
Hoy quiero darles las gracias a todos los que han tocado mi vida en el periódico El Día. Les rindo un tributo por su fortaleza, determinación y profesionalidad. ¡Juntos hacemos la diferencia!