La nación mexica es tierra de inmensos poetas, narradores y ensayistas, además de grandes pintores y artistas en general. Ha sido históricamente así y todavía hoy continúa siéndolo.
Sin embargo, al mismo tiempo, sus instituciones educativas y culturales y sus pensadores, intelectuales, escritores y artistas se complacen en invitar y acoger a sus pares de toda Latinoamérica en ocasiones como efemérides patrias, festivales, ferias, foros, seminarios, entre otros.
Personalmente, he tenido la dicha de haber participado en encuentros de poesía y crítica literaria convocados en Veracruz, Morelia, Ciudad de México y Villahermosa.
Esta vez, la cita original fue nuevamente Villahermosa, Tabasco, donde se siguen celebrando cada año las Jornadas Pellicerianas, Encuentros de Poesía, que homenajeaban, del 16 al 19 de este mes de febrero, al maestro tabasqueño de generaciones, poeta, museógrafo, crítico de arte, activista político y promotor cultural Carlos Pellicer Cámara, de quien se conmemoran los ciento veinticinco años de su nacimiento. Sin embargo, mi respuesta afirmativa a esta invitación desencadenó otras dos que permitieron un reencuentro con México más diverso y enriquecedor.
Fueron cinco días de intensa actividad literaria. La semana inició el lunes 14 con una lectura de poesía organizada en su sede por la Embajada de República Dominicana en México, conmemorando el Mes de la Patria, en la que participó la propia embajadora María Isabel Castillo Báez, junto al maestro Rubén Ruiz Guerra, director del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIAL) de la UNAM y, de manera virtual, el poeta, ensayista y académico, además de dilecto y viejo amigo, Adolfo Castañón, quien tuvo a su cargo la introducción formal del invitado y un enjundioso comentario sobre su obra poética y ensayística. Estuvieron allí presentes, además, destacados poetas, escritores e intelectuales mexicanos como Mario Bojórquez, Víctor Manuel Mendiola, Claudia Posadas y Jorge Fernández Granados, entre otros.
El martes 15 viajamos, la embajadora Castillo Báez, mi esposa Soraya y yo hacia Acapulco, Guerrero, donde se me invitó a participar, desde la Presidencia de México y su Estrategia Nacional de Lectura, como del Consejo de Memoria Histórica y Cultural de esa nación, en calidad de invitado especial internacional, de una sesión de los Fandangos de Lectura, iniciativa que encabeza la esposa del presidente López Obrador, la periodista y escritora Beatriz Gutiérrez Müller, junto al coordinador del Consejo de Memoria Histórica y Cultural de México, Eduardo Villegas Megías, en la que se estimula a los niños, adolescentes y jóvenes a descubrir la importancia de la lectura en su formación como personas y como futuros profesionales.
Esta fue una grata y memorable experiencia, que contó con la lectura de poesías de autores mexicanos y de quien escribe a múltiples voces, desde las autoridades civiles del estado de Guerrero, la embajadora dominicana Castillo Báez y destacadas figuras del arte, el cine, la educación y la cultura en México, hasta los escolares de diferentes distritos que protagonizaron la actividad.
Fue emocionante para mí el hecho de que el evento concluyera con la lectura colectiva de mi poema “Lenguaje del mar”, como un sentido homenaje de la nación mexicana al 178 aniversario de la Independencia de la República Dominicana.
El mismo día, viajamos desde Acapulco a Villahermosa, Tabasco, donde al día siguiente se inauguraron las Jornadas Pellicerianas 2022, con un programa de lecturas poéticas, conferencias en torno a la trascendental figura de Carlos Pellicer, exposiciones pictóricas y fotográficas, así como presentaciones de libros, talleres de lectura y escritura, entre otros encuentros.
Fue placentero reencontrarme con amigos y conocer nuevas y destacadas personalidades de las letras, la poesía, la actividad editorial y la promoción cultural de México, Centroamérica, Suramérica y el Caribe hispánico.