A Barry Bonds (2,935) le faltaron 65 hits para llegar a 3,000, cifra a la que sólo han llegado 30 en Grandes Ligas con el ingreso reciente de Ichiro Suzuki.
También le faltaban cuatro carreras empujadas (1996) para convertirse en el cuarto jugador en arribar a 2 mil remolques: Hank Aaron (2,297), Babe Ruth (2,214) y Álex Rodríguez (2,084).
Y ese retiro forzoso a Bonds, quien no consiguió trabajo en 2008, ocurrió después que en el año 2007, en apenas 340 turnos, dio 28 jonrones, remolcó 66 carreras, anotó 75 y recibió 132 boletos con .480 en su porcentaje de embasarse (OBP). Insisto, ¡nadie le dio trabajo! para insertarse en esas cifras emblemáticas al líder de jonrones de todos los tiempos (762).
Me incluyo entre los que consideran que Bonds ha sido el mejor jugador de la historia, con Willie Mays y Babe Ruth de escoltas. Entre sus grandes hazañas están algunos registros de 2004 cuando recibió 232 boletos -120 intencionales- y aún así dio 45 jonrones, remolcó 101, anotó 129 y fue líder de bateo con promedio de .362 (373-135) en 617 apariciones en el home. Las 2,558 transferencias -688 intencionales-, líder histórico en ambos casos, también evitaron que diera 3 mil hits.
Bonds, gringo de pura cepa, nacido y criado en los dogouts de grandesligas, con un cúmulo de estadísticas espaciales, también ha tenido dificultades para ingresar al Salón de la Fama de Cooperstown y en su cuarta oportunidad sólo obtuvo el 44.3 por ciento de los votos.
Y escucho personas diciendo que el caso de Álex Rodríguez es por que es “medio-dominicano”. ¡Y eso que Bonds ha sido un niño de tetas, en travesuras, delante de Álex!