Alcalde del Distrito Nacional, David Collado encabeza operativo de limpieza en la Circunscripción 3. Foto: Elieser Tapia.
Santo Domingo.-Las nuevas autoridades municipales al parecer han descubierto de manera tardía que una cosa es con guitarra y la otra es con violín, pues durante la campaña se dedicaban a ofrecer “villas y castillos”, ignorando lo que muchos de los alcaldes que ellos enfrentaban advertían sobre la realidad municipal, como es lo relativo al déficit de flujo de caja con la que esas corporaciones edilicias suelen manejarse.
En el caso del Distrito Nacional, el actual alcalde, David Collado, y el grupo que lo soporta tienen el reto de poner de manifiesto sus dotes administrativas, pues hereda un Cabildo con un superávit contable superior a los ocho mil millones de pesos, pero requerirá de eficiencia recaudataria para disfrutar de ese colchón financiero.
Ese superávit contable es como consecuencia de que ha asumido una institución con deudas estimadas en unos 1,500 millones de pesos, pero con cuentas por cobrar de unos 10 mil millones de pesos, lo que deja un saldo a su favor de 8,500 millones de pesos.
Los 1,500 millones de pesos en deuda recibidos por la actual administración es un monto cercano a los 1,200 millones recibidos por la administración de Salcedo, a sabiendas de que en términos reales lo del año 2002 equivaldría a casi 4,000 millones del valor del peso de ahora.
El pasado viernes el actual alcalde señaló que el Ayuntamiento del Distrito Nacional tenía una deuda de 300 millones de pesos con la Dirección General de Impuestos Internos (DGII). Sin embargo, en el portal de la DGII apenas aparece registrada una deuda del ADN 113 millones de pesos, sobre la cual hay un acuerdo de pago vigente.
El flujo de caja de los ayuntamientos es el mayor reto que tienen los alcaldes, pues el principal compromiso que tienen es el pago de la recogida de la basura, servicio que en el Cabildo no se ha detenido por falta de pago en los últimos 14 años, lo cual indica que ha habido un flujo de pago coordinado con las empresas recolectoras de los residuos sólidos.
Se recuerda que hasta 2002 la recogida de la basura en la zona que actualmente es el Distrito Nacional era pagada por el Gobierno, pero el entonces presidente Hipólito Mejía decidió dejar de pagarlo, por lo que el Cabildo debió asumir ese costo, pese a que nunca se ha distribuido entre los ayuntamientos el 10 por ciento de los ingresos tributarios del gobierno como establece la ley municipal. Ese simple concepto le ha representado gastos adicionales por más de RD$5,000 millones, según explicó un antiguo funcionario municipal.
También el Cabildo sirvió en 2001 como garante solidario de un préstamo por 420 millones de pesos de ese entonces a favor de la Federación Nacional de Transporte La Nueva Opción (Fenatrano), la mayor parte del cual tuvo que solventar el Ayntamiento capitaleño en los años siguientes tras convertirse en deudor.
En el caso del Distrito Nacional, a Collado le corresponde mostrar sus dotes de administrador manejando las precariedades económicas con la que se desempeñan los cabildos, atender las numerosas promesas de campaña y mantener un ritmo de ingresos que le permita un flujo de caja.
Según consta en el informe financiero entregado a la administración Collado, copia del cual recibió EL DÍA, el Cabildo capitalino tiene como cuentas por pagar RD$1,047 millones a suplidores y contratistas, RD$113 millones a la DGII, a los que se les debe sumar la deuda financiera del préstamo navideño por 33 millones de pesos (que se terminan de pagar en octubre), una línea de crédito reconductiva de 85 millones de pesos (que se salda cada mes y se reengancha) y un préstamo para el fortalecimiento del sistema de aseo de la ciudad por 230 millones de pesos.
Collado encabeza operativo de limpieza
El nuevo alcalde, David Collado, encabezó ayer un gran amplio operativo de limpieza en los barrios de la circunscripción 3 de la Capital.
En la jornada Collado dijo que esta era una muestra de lo que
será la actual gestión. “Nuestros escritorios estarán en las calles, el mío, el de la vicealcaldesa y el de los regidores, con el convencimiento claro de que la ciudad es la gente y la gente es la ciudad”, señaló.
El ejecutivo municipal se hizo acompañar de la vicealcaldesa Digna Reynoso y varios regidores.