Recientemente publiqué en la Feria del Libro Católico, “20 valores para vivir”, un documento que combina un enfoque humanista y espiritual de los valores humanos e invita a vivirlos desde la cotidianidad y a partir del ejemplo de Cristo.
Escribir sobre los valores a partir de la fe surge de una reflexión personal sobre la obligatoriedad de mirar a Jesús como fuente de la ética y la moral. Él es el paradigma y ejemplo de enseñanza y práctica de todo lo que es bueno, bello y necesario para la sociedad.
Ante la descomposición social, la violencia, la delincuencia, la corrupción, la degradación del medio ambiente, la pérdida de identidad y sentido del hombre y la mujer, las sociedades reclaman la vuelta al humanismo, a la ética y a los valores.
Y si queremos valores, el referente imprescindible es Jesús. Volver a Él es volver a los valores. Las personas necesitamos mirar a Jesús, su valentía, sensibilidad, humildad, solidaridad, inmersión social, su encuentro con el otro, su respeto por el ser humano y su exaltación de la dignidad de la mujer. Para volver a los valores necesitamos contemplar toda su vida.
Jesús revoluciona las costumbres y el éthos de su época y de la civilización occidental. El poder transformador de Jesús sigue presente. Los valores que Él vivió siguen vigentes hoy más que nunca.
Es más, si el mundo no vuelve su mirada a Jesús como referente espiritual, humanismo y de transformación social corre el riesgo de morir espiritual y físicamente. Volver a los valores salvará al hombre, a la mujer, a las familias, a la sociedad y al planeta.
“20 valores para vivir” va dirigido a los que apuestan por los valores. A quienes están convencidos de que vivir desde valores es lo único sostenible en este mundo, porque el mal en sí mismo engendra destrucción de todo lo que toca. Lo único que es eterno y da frutos que perduran es el bien. Con este libro hago un llamado vivir desde el bien y a amar, nuestra única misión en este mundo.