Nueva York.- Sobornos en el fútbol y el atletismo, dopaje institucional en Rusia, extorsión en la selección de Francia y hasta polémica por un dedo en el trasero. ¿Controversias? El 2015 las tuvo de sobra.
Ningún escándalo tuvo tanta repercusión como las investigaciones que pusieron a temblar al fútbol: hasta ahora, provocaron las suspensiones por ocho años de Joseph Blatter y Michel Platini, dejaron tras las rejas o acusados de recibir sobornos a los tres últimos presidentes de la Conmebol y la CONCACAF, y desataron casos judiciales que no se resolverán al menos hasta 2016.
Un repaso a los casos más sonados del año:
EL FUTBOL EN APRIETOS
Parecía una cita cualquier del comité ejecutivo de la FIFA. Los máximos dirigentes del fútbol se reunían a fines de mayo en la sede del organismo en Zúrich, la mayoría hospedados en el lujoso hotel Baur Au Lac, con habitaciones que cuestan miles de dólares la noche.
Pero lo que sucedió en la madrugada del 27 de mayo puso en marcha sucesos que cambiaron el rostro del fútbol por siempre.
Siete dirigentes fueron arrestados ese día por las autoridades suizas a pedido del Departamento de Justicia estadounidense, que horas después anunció las acusaciones contra 14 personas, incluyendo altos funcionarios de la Conmebol y la CONCACAF, y empresarios del marketing deportivos.
Los cargos tenían que ver con el pago de millonarios sobornos a cambio de los derechos comerciales de torneos como la Copa América, Copa Libertadores y las eliminatorias mundialistas.
Blatter fue reelegido dos días después a un quinto período como presidente de la FIFA, aunque el daño ya estaba hecho.
Bajo inmensa presión pública y asediado por otra pesquisa de las autoridades suizas sobre las campañas y votación para elegir las sedes de los mundiales de 2018 y 2022, el eterno dirigente anunció que dejaría el cargo en unas elecciones especiales en febrero.
Blatter, hasta hace poco inmune a los innumerables escándalos que han ocurrido durante su mandato, finalmente fue suspendido ocho años por el comité de ética de la FIFA por un pago de dos millones de dólares que autorizó en secreto a Platini en 2011, supuestamente por salarios adeudados de la época en que el ahora mandamás de la UEFA era su asesor.
Ese pago también es blanco de un caso criminal en Suiza. Las autoridades estadounidenses anunciaron una segunda ronda de acusaciones contra funcionarios del fútbol el 3 de diciembre, cuando fueron arrestados en Suiza —de nuevo en la antesala de una reunión del comité ejecutivo, y otra vez en el hotel Baur Au Lac— los actuales presidentes de la Conmebol, Juan Angel Napout, y de la CONCACAF, Alfredo Hawit. Quizás los dirigentes busquen otro lugar donde hospedarse en 2016.
RUSIA: DOPAJE, SOBORNOS Y SUSPENSION
La federación internacional de atletismo (IAAF, por sus siglas en inglés) suspendió el 13 de noviembre a Rusia de toda competencia internacional, pocos días después que un informe comisionado por la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) reveló un masivo programa de consumo de drogas para mejorar el rendimiento entre los atletas de ese país.
El Estado habría sido patrocinador de dicho programa de dopaje. La investigación de la AMA descubrió un dopaje masivo entre los atletas rusos, especialmente los de pruebas de fondo e incluyendo a medallistas olímpicos.
Además, reveló que dirigentes rusos se encargaron de ocultar resultados positivos, e incluso que agentes del servicio de inteligencia del país espiaban las operaciones de un laboratorio antidopaje durante los Juegos Olímpicos de Invierno de 2014 en Sochi.
Al mismo tiempo, las autoridades francesas anunciaron una pesquisa contra el expresidente de la IAAF, Lamine Diack, su hijo y el exjefe antidopaje del organismo, quienes supuestamente colaboraron con las autoridades rusas para ocultar casos de dopaje de sus atletas.
Además, los funcionarios fueron acusados de extorsionar a atletas, a los que pedían dinero a cambio de ocultar casos de dopaje.
La suspensión de la federación rusa amenaza con marginar a sus atletas de pista y campos de los Juegos Olímpicos del próximo año en Río de Janeiro, a menos que el organismo demuestre que cumple con una serie de reformas ordenadas por la IAAF.
EL CASO BENZEMA
Karim Benzema, delantero de Real Madrid y estrella de la selección francesa, fue acusado el 5 de noviembre por las autoridades de su país, por su presunta participación en una trama para extorsionar a su compañero en Les Bleus, Mathieu Valbuena.
Según la pesquisa, Benzema colaboró con un amigo de la infancia que intentaba extorsionar a Valbuena con un supuesto video de índole sexual.
Benzema fue suspendido de la selección a principios de diciembre, y tiene prohibido acercarse a Valbuena mientras dure el caso judicial.
Ambas medidas ponen en entredicho su participación en la Eurocopa del próximo año que se realizará en Francia.
DEFLATEGATE
El 18 de enero, los Patriots de Nueva Inglaterra apalearon por 45-7 a los Colts de Indianápolis en el partido por el campeonato de la Conferencia Americana y consiguieron el boleto al Super Bowl, donde eventualmente derrotarían a los Seahawks de Seattle para conquistar el cuarto título de la era Tom Brady-Bill Belichick.
Poco después de la victoria sobre los Colts, surgió una denuncia de que los balones utilizados por Brady estaban inflados por debajo del límite mínimo permitido por la NFL.
Entonces nació el “Deflategate”. El escándalo dominó los titulares en la antesala del Super Bowl, y provocó una investigación de la liga que costó millones de dólares.
Finalmente, la NFL anunció el 11 de mayo que Brady sería suspendido por los primeros cuatro partidos de la temporada de 2015, al considerar que al menos estaba al tanto de que los balones fueron manipulados.
Sin embargo, el quarterback apeló el fallo ante la justicia, un juez revocó la suspensión y Brady pudo jugar la temporada completa. La NFL recurrió la decisión del juez, y el caso no se resolverá hasta 2016.
EL DEDAZO DE JARA
En una Copa América que tuvo una buena cuota de polémica —desde el choque de Arturo Vidal en estado de ebriedad hasta la expulsión de Neymar por lo que restaba del torneo tras agredir verbalmente a un árbitro— el incidente protagonizado por Gonzalo Jara y Edinson Cavani quedará grabado por siempre.
El anfitrión Chile y el campeón Uruguay se enfrentaron el 24 de junio en Santiago por los cuartos de final del torneo. Fue un partido de poco fútbol y mucho roce, lleno de provocaciones y empujones.
En la acción más recordada, Jara aprovechó un descuido del árbitro y provocó al delantero uruguayo metiéndole un dedo en el trasero.
Cavani reaccionó con un manotazo, que Jara exageró tirándose al suelo, justo cuando el árbitro se dio vuelta para mirarlos.
Cavani fue expulsado y Chile terminó ganando 1-0. Cuatro días después, Jara fue suspendido cuatro partidos por la provocación a Cavani, que se popularizó con el nombre del “dedazo”.
