Tony Pichardo.
Haber trabajado por varios años en el área de comunicación del Ministerio de Educación y a través de este trabajo visitar una gran cantidad de centros educativos en todo el país, me permite conocer un poco el sistema educativo dominicano y la situación de muchas escuelas. En ese sentido, sin considerarme experto en el tema, tomo el atrevimiento de hacer algunas sugerencias en la búsqueda de mejorar su funcionamiento, a propósito de la propuesta de “reorientar” más de 4 mil millones de pesos del presupuesto.
- Falta de agua potable. Uno de los principales males observados en muchos centros educativos es la falta de agua. Aproximadamente el 70 por ciento de las escuelas no cuentan con agua corriente en baños y cocinas. En muchas de estas escuelas utilizan tanques o barricas con agua acumulada. Alrededor de un 10 o 15 por ciento tienen agua en sus llaves. El agua en los tanques, en muchos casos guardada por varios días estaba sucia o tenían larvas (gusarapos) productores de mosquitos. Esta situación convierte estos espacios educativos en focos de contaminación y enfermedades como el dengue. Es tarea pendiente del Ministerio de Educación resolver esta situación.
- Almuerzo y desayuno escolar. En mi recorrido pude constatar que en el caso del desayuno escolar que sirve a los niños se les ofrecía jugos empacados en cartón con alto contenido de azúcar, muchas veces acompañado de un bizcocho también dulce o un pan. Especialistas que han realizado estudios del tema, explican el efecto de los azúcares en el organismo de las personas, en este caso de niños y niñas. En el caso del almuerzo las quejas son constante debido a la mala calidad. Pude observar combinaciones de arroz con espaguetis, arroz con huevo y solo en algunas escuelas se sirve carne uno o dos días a la semana. Sin embargo, lo que más me llamó la atención es que estos alimentos son llevados a estos centros por suplidores, cuando las escuelas cuentan con cocinas. Observamos que en los casos que las comidas son preparadas en las cocinas de los propios centros educativos, son de mejor calidad y además que beneficia mujeres y pequeños productores de las comunidades.
- Programa República Digital Educación. Este programa ha operado bien, en lo concerniente a la entrega de equipos electrónicos a estudiantes y maestros, sin embargo, contactamos serios problemas de conectividad, sobre todo en centros educativos de las provincias al interior del país.
- Terminación de muchos centros educativos que fueron iniciados y hoy están iniciados, a la mitad o pendiente de equipar.
- Definir de manera administrativa el tema religioso en las escuelas. Hay un caos en ese sentido ya que hay profesores católicos, evangélicos y de otras denominaciones religiosas y cada uno quiere poner en práctica y hasta imponer sus creencias.
- Actualizar el contenido curricular relativo a las horas de la Jornada Escolar Extendida. Observé a esas horas muchos niños y niñas deambular en los centros educativos porque no existe o no se aplica lo planificado.
- Aplicar, bajo supervisión el proceso de descentralización en las Regionales y Distritos Educativos para el mejor desenvolvimiento administrativo y gestión de las escuelas.
- Retomar los trabajos de Radio Televisión Educativa con una programación al servicio del trabajo que se realiza en los centros educativos, las entidades descentralizadas y el ministerio de educación en su conjunto. Facilitar una mejor formación a su personal y de esta manera implementar un programa piloto de clases a distancia. La contratación de productoras privadas en el pasado proceso producción de programas para las clases a distancia, ocurrido como consecuencia del confinamiento a que nos obligó la pandemia fue necesario la erogación de una enorme cantidad de dinero por parte del Minerd.
- Equipar las escuelas de laboratorios de ciencias, informática y mejorar las instalaciones deportivas. Un estudio realizado en el 2019 por la Asociación Dominicana de Profesores reporto que un 72% de los centros de enseñanzas no cuentan con laboratorios.
- Habilitar las escuelas de bibliotecas. El estudio de la ADP refiere también que un 50% de los centros dijo no tener una biblioteca disponible.
