Este domingo 1.º de mayo, Día del Trabajo, tendrá a efecto la que podría considerarse la primera actividad en la historia dominicana enfocada hacia la solución de uno de los males más nocivos en el fundamento de nuestra nación.
La nación dominicana está fundamentada en su población. Su población, actuando sobre el país -que es el territorio y sus bienes naturales- se ha estado esforzando desde 1844 en darse una estructura funcional que pueda permitirles vivir sin las precariedades que normalmente padecen los grupos humanos que deben vivir sobre territorios pobres por naturaleza.
Pero se da el caso de que nuestro territorio es rico por naturaleza, por tanto, no deberíamos padecer pobreza y precariedades.
Las necesidades básicas a suplirse en las sociedades humanas son: 1. Agua (y tenemos suficiente agua para todos); 2. Alimentos (y tenemos suficientes tierras para producirlos en grandes cantidades); 3. Techo (y tenemos suficientes materiales y espacio para que todos tengamos casa digna y segura); 4. Ambiente sano (y tenemos todavía suficientes espacios para desarrollar un buen ambiente); y 5. Salud (y si conseguimos las cuatro premisas anteriores nuestra salud estaría garantizada).
Pero, ¿por qué no tenemos suplidas esas necesidades básicas todos los dominicanos y dominicanas? Pues porque le hemos dejado al Estado la conducción de la nación para operar sobre nuestro país sin que a nadie se le haya ocurrido que el Estado no es lo que dice ser: el administrador de los bienes de la nación, sino que se ha convertido, con el paso de los años desde 1844 hasta acá, en representante de pequeños sectores que operan los mecanismos económicos establecidos para su provecho propio y no de la población.
Pues la necesidad básica de un techo: de una vivienda digna, segura y ambiental, podemos llenarla si todos los dominicanos y las dominicanas nos decidimos a ello. Ya comenzamos desde el 1.º de diciembre pasado. Pero este domingo 1.º de mayo, cuando se celebra la fiesta de todos los trabajadores y trabajadoras del mundo, la Fundación Futuro Cierto realizará un teletón con dos objetivos principales: 1. Recaudar 25 millones de pesos para iniciar la construcción de edificios en El Caliche de Villa Duarte y Elías Piña; y 2. Difundir lo más ampliamente posible en toda la nación dominicana la existencia de este proyecto y de su alcance.
Siendo los trabajadores y trabajadoras el sector de mayor presencia sobre las zonas pobladas del territorio nacional, pero así mismo, de mayor precariedad, pobreza, indignidad, inseguridad y contaminación ambiental en el medio que habitan, deberían ser éstos y éstas los más esforzados en el éxito del teletón del 1.º de mayo.
Pero además, deberían ser los trabajadores y campesinos los más empeñados en lograr que un problema tan grave como el de la vivienda sea solucionado como resultado de la lucha solidaria de toda la población, porque eso demostraría que solamente los pueblos, mediante la lucha bien focalizada, pueden resolver todos sus problemas. Uno a uno, pero todos sus problemas.
Así que comencemos con este problema de la vivienda. Y veremos cómo los demás problemas generados en torno a las necesidades básicas de la población dominicana van perfilando su solución a corto o largo plazo, pero solución al final.
Que sea el siglo XXI el siglo de la redención de la nación dominicana, y que los trabajadores y campesinos sean, finalmente, los constructores de la nación más saludable, próspera, segura y ambientalmente sana, que toda la sociedad desea desde hace tanto tiempo.