Santo Domingo.-Se calculan en decenas los haitianos indocumentados que voluntariamente han retornado a su país por miedo a ser repatriados tras la conclusión del Plan Nacional de Regularización de Extranjeros.
En cada uno de esos retornos la motivación parece ser generalizada: “Tengo miedo de perder mi cama, mi televisor, mi radio, y muchas cosas más que he comprado”, es el argumento expuesto por el nacional haitiano Jean Pierre, quien no logró inscribirse en el Plan.
Es precisamente ese temor el que sienten muchos otros inmigrantes que también han dejado su “tierra prometida” para volver a sus orígenes.
Quienes se encuentran en la misma condición de Pierre, quien tenía 15 años en el país, alegan que si son apresados por miembros de Migración no tendrán tiempo de recoger sus pertenencias que con un trabajo “duro” durante años han conseguido.
Jonathan Mielus expresó que tan pronto consiga el dinero del pasaje hacia Puerto Príncipe se irá sin pensarlo dos veces, para evitar volver a vivir una mala experiencia como cuando en 1992 fue golpeado por efectivos del Ejército tras intentar entrar ilegalmente al país. Las mudanzas completas de nacionales haitianos se calculan entre 15 y 20 por día en el paso fronterizo que comunica a Dajabón con Juana Méndez. El éxodo empezó desde el pasado miércoles.
Mientras se produce este efecto migratorio, en los lugares frecuentados por haitianos hay una baja presencia de estos. Ayer Paul Alonso, representante de los derechos humanos en Juana Méndez, dijo que el retorno de decenas de compatriotas está causando incertidumbre en esa nación, ya que muchos no tienen a dónde ir.
Hasta el momento las autoridades de Migración no han informado de la primera repatriación oficial.
Análisis de expedientes
Empleados del Ministerio de Interior y Policía trabajan en el análisis de las 288,466 solicitudes que fueron recibidas en el plazo que duró el Plan Nacional de Regularización. Se tiene previsto que los posibles beneficiarios empiecen a recibir información de su estatus migratorio en la brevedad posible.
El decreto 327-13 que instruyó el Plan otorga un plazo de cuarenta y cinco días para que se atiendan las solicitudes de los extranjeros. Quienes clasifiquen serán debidamente documentados para que eviten ser repatriados en los operativos que llevará a cabo Migración.
