SANTO DOMINGO.-En las farmacias del país ya no se venderán sin receta los estimulantes sexuales ni las medicinas antihipertensivas, las hormonales o los medicamentos para controlar la diabetes.

La ministra de Salud Pública, Altagracia Guzmán Marcelino, explicó que ya tienen definidas cuáles son las medicinas de libre venta y las que se pueden comprar sin receta, pero que iniciarán con esos cuatro medicamentos para evitar un desbalance en el sistema financiero de la Seguridad Social.

“La receta tiene que ser debidamente sellada”, advirtió Guzmán, al participar, junto a los demás integrantes del sector salud, en el encuentro de los medios y los ciudadanos que realiza el Gobierno.

Informó que un organismo internacional les ayuda a elaborar un plan de orientación dirigido a todos los sectores, por lo que iniciarán una campaña antes disponer la prohibición.

También se comprarán solo con receta los medicamentos del área de la salud mental, del dolor y los de prescripción médica.

Sistema no ha colapsado

La ministra negó que el sistema de salud está colapsado, aunque reconoce que tiene deficiencias.

“Tenemos que corregir indudablemente, pero de ahí a ruina es otra cosa, de ahí a destruido tampoco, porque los indicadores desmienten el colapso”, dijo.

Aseguró que el sistema de salud se mide por indicadores y si el del país estuviese colapsado no habría aumentado la esperanza de vida o reducido el dengue de 6,619 casos en 2016 a 1,359 casos en 2017.

Informó que el Ministerio invirtió 62 mil 113 millones 719 de pesos en los diferentes programas implementados durante el año 2017, que es el 93 % de lo presupuestado.

Mientras que el director de Promese/Cal, Antonio Peña Mirabal, dijo que las Farmacias del Pueblo vendieron en 2017 unos 5,378 millones de pesos. Defendió la calidad y eficacia de los mismos.

Estimulantes sexuales

—1— Comercialización
Los estimulantes sexuales son muy populares entre los jóvenes y se venden sin control.
—2— Composición
Contienen sildenafilo, utilizado para tratar la disfunción eréctil y la hipertensión arterial.
—3— Peligrosidad
El uso indebido deja secuelas psicológicas e incluso produce muerte.