Celedonio Jiménez
Las redes sociales son un nuevo e importante medio de interacción en la sociedad de hoy. Son conductos que conectan personas, grupos de personas e instituciones permitiendo su influencia mutua.
Posibilitan la comunicación de los individuos con familiares, con amigos y con los amigos de sus amigos. Esta nueva forma de interacción social se hace viable con el alto desarrollo de la tecnología, y, en particular, con el desarrollo del internet.
Estas redes son una forma de interacción social, no sólo porque suponen una acción entre dos o más sujetos, sino porque su accionar revela la intención de influir en otro u otros.
El hecho de que la acción no lleva una relación directa, física, personal, no le quita el carácter social. Ha sido criticado cómo a veces se exagera el uso del celular o del computador para la comunicación entre personas que están próximas.
Se ha dicho que el móvil “aleja a los que están cerca y acerca a los que están lejos”.
La afición por el móvil, o su utilización desproporcionada, reduce los contactos personales y llevan, hasta cierto punto, a la frivolidad. Por ejemplo, algunos dan “el pésame” mediante mensajes celulares, cuando se entiende que un acto de esa naturaleza requiere, salvo obstáculos extremos, presencia y calor humano.
Otras críticas refieren que en las redes sociales algunos jóvenes dedican mucho tiempo a la “chercha” y que en su uso se exponen muchos detalles personales, lo cual puede ser un peligro para la seguridad e integridad personal.
Otro cuestionamiento respeto a lo que se difunde por las redes sociales, es que su contenido no atraviesa un filtro y por tanto lo que se dice puede ser verdad o mentira, y por tanto edificador o desorientador.
A tono con esta inquietud se ha hablado de “nuevas reglas de comunicación” internacional, que suponen la grabación de todas las llamadas telefónicas registradas, la grabación de todos los mensajes y llamadas por whatsapp, así como el monitoreo de otros instrumentos de las redes sociales.
Esto, además de obedecer a diversos propósitos, obliga a cuidar las informaciones y “confesiones” que se hacen a través de los medios tecnológicos.
Sin obviar lo anterior, las redes han sido un recurso de interacción social válido. El balance es fundamentalmente positivo.
Las redes sociales han dinamizado las sociedades, han sido un efectivo medio de información, de debate y de impulso a grandes procesos y movimientos sociales, políticos y culturales, en nuestro país y en el mundo.
