Por: Joan Vargas y Teresa Casado
SANTO DOMINGO.-Luego ultimar a su pareja junto a los tres hijos de esta, Víctor Alexander Portorreal Mendoza (Greña) continuó actuando de manera normal y sin mostrar indicios del horrendo crimen que había cometido, yéndose incluso de paseo a la playa con una amiga.
Según la solicitud de medida de coerción, Portorreal Mendoza supuestamente amordazó, violó y mató a Reyna Isabel Encarnación Morales de varias estocadas en el cuello, tórax y abdomen mientras se encontraban en la habitación de ambos en horas de la mañana del pasado domingo 4 de febrero.
Luego de dejar el cadáver de Encarnación Morales encerrado, se dirigió hasta la habitación donde se encontraba la menor de 6 años, a quien violó y estranguló con sus propias manos, acción que repitió con la niña de 10.
Acto seguido, el imputado tomó al menor de 9 años, quien se encontraba jugando fuera de la residencia, y lo llevó hasta la casa de una tía, donde permaneció hasta recogerlo a las 11 de la noche y regresar a la vivienda; allí utilizó dos corbatas para ahorcarlo, colgándolo en un tubo del clóset de la misma habitación donde se encontraban los cadáveres de sus hermanas.
Después del crimen
Al siguiente día, lunes 5 de febrero, el acusado visitó al padre de su pareja, en el sector San Carlos, a buscar ropa de los niños, sin mostrar a los familiares de sus víctimas indicios de lo que había hecho.
Horas más tarde, Portorreal Mendoza se comunicó con una amiga con la que se reunió, compró bebidas alcohólicas y cigarrillos para luego dirigirse a hasta la playa a bordo de una motocicleta.
“Llegamos a la playa y compartimos normal, aproveché el momento para preguntar qué pasaba entre él y Reyna, porque ella me dijo por Whatsapp que él le hizo algo muy grande, algo que, según ella, solo tres hombres le habían hecho tanto daño, pero que nunca me diría”, declaró Krystel Alexandra Tejada a las autoridades.
El día seis del mes en curso, el imputado continuó haciendo su vida normal, cogió la ‘tablet’ del niño y la empeñó a una persona por RD$500.
Al día siguiente, Tejada se comunicó vía telefónica con Portorreal Mendoza manifestándole que quería ver a Reyna y los niños, pero este le propuso que lo dejara para el fin de semana bajo la excusa de que “la casa estaba muy desorganizada”.
El fuerte hedor y un enjambre de moscas que salían de la casa alertó a los vecinos, dando parte a las autoridades, quienes al forzar la puerta principal de la residencia, ubicada en la calle Antonio Álvarez, del kilómetro 8 de la carretera Sánchez, encontraron los cuatro cuerpos en avanzado estado de descomposición.
Tras el hallazgo de los cadáveres, Miguel Alejandro Peña Marranzini, jefe de Víctor Alexander Portorreal Mendoza, y Krystel Alexandra Tejada se comunicaron con este, pues se habían enterado de los hechos, los cuales les confesó, pero les dijo que se encontraba bien.
Finalmente, fue apresado el pasado viernes en el sector 30 de Marzo.
—Medida de coerción
El juez de Atención Permanente del DN, José Alejandro Vargas aplazó para hoy la medida de coerción de Víctor Alexander Portorreal, para que los familiares de las víctimas estén presentes en audiencia.
El padre de menores dice no guarda rencor
Entrevista. ¿Cuándo fue la última vez que vio a sus hijos?
-Hace varias semanas, vi la de seis años cuando mi hermana la trajo hasta mi casa, les envié un mensaje a los dos mayores, pues no los veía con frecuencia”.
¿Alguna vez sus hijos le comentaron alguna inquietud sobre su padrastro?
-Nunca me manifestaron ningún tipo de inconformidad con la pareja de su madre, pero me decían que preferían estar conmigo, pues nunca he sido un mal padre.
¿Qué espera de la justicia?
-Cualquier decisión del juez no me devolverá a mis hijos, espero que las leyes se cumplan, pero cuando el acusado sea enviado a la cárcel no quiero que los internos le pongan la mano y que más bien este pague su culpa y reflexione sobre los hechos.