Un parto prematuro permea todos los estratos de la población.
Santo Domingo.-Las estadísticas en República Dominicana apuntan a que once de cada 100 recién nacidos llegan al mundo demasiado pronto.
La doctora Adriana Oliart destaca que la prematuridad es responsable del 36 % de las muertes que ocurren en los primeros 28 días de vida, siendo la principal causa de mortalidad neonatal en el país.
Explica que el parto prematuro puede ocurrir por múltiples razones: “Las causas más frecuentes de parto prematuro son los embarazos múltiples, las infecciones sufridas durante el embarazo, y las enfermedades crónicas, como la diabetes o la hipertensión, sin embargo un porcentaje alto de estos ocurre espontáneamente”, indica.
Al cuestionarla sobre si estas causas pueden evitarse, sostiene que debido a la etiología multifactorial y en ocasiones no conocidas del parto prematuro, existen medidas que pueden tomarse para ayudar a las mujeres, sobre todo aquellas con factores de riesgo, a reducir las posibilidades de presentarlo.
La galena, quien es la gerente de administración de Salud Materno Infantil de la Primera ARS de Humano, resalta que la prevención es un factor clave en la disminución de algunos de estos factores, como por ejemplo las infecciones del tracto genital y urinario, las periodontales, y la anemia materna.
“Las estrategias de prevención del parto prematuro deben ir orientadas a la disminución de estos factores potencialmente modificables”, reitera.
Oliart precisa que en 2016 la tasa de mortalidad neonatal reportada fue de 17 por cada mil 1000 nacidos vivos, “estas muertes se asocian no solo a la prematuridad, sino también a anomalías congénitas, condiciones infecciosas del recién nacido y problemas respiratorios”.
Cientos de miles
La especialista agrega que costo de la prematuridad no está solamente suscrito a los gastos asociados al nacimiento, ya que los niños que nacen antes del tiempo necesario para completar su madurez pueden presentar complicaciones a largo plazo, que repercuten en el costo global de su salud.
Detalla que un prematuro puede requerir de soporte especializado en sus primeros días de vida, para ayudarlo a completar el proceso de transición que no logró dentro del vientre de su madre.
Estos cuidados, prosigue la doctora, pudieran incluir el uso de medicamentos costosos, como el surfactante alveolar, para manejar las complicaciones respiratorias de la prematuridad, además de estadías prolongadas en unidades de cuidados intensivos neonatales; el costo de atención a un prematuro puede ascender a cientos de miles de pesos.
Las secuelas
“A largo plazo, los niños nacidos demasiado pronto también presentan secuelas y complicaciones, por ejemplo retinopatía de la prematuridad, retraso en el desarrollo cognitivo y mayor susceptibilidad a desarrollar enfermedades crónicas en su vida adulta, como la diabetes y la hipertensión”, explica.
Dice que a pesar de que el sistema presenta grandes oportunidades en este ámbito, estas están siendo atendidas por los distintos sectores involucrados. Un ejemplo de esto es el Plan Nacional por la Salud del Recién Nacido, del Ministerio de Salud, el cual incluye estrategias para reducir las muertes neonatales en el país.
Los riesgos para ambos
Dice que los niños que sobreviven a un parto prematuro no están libres de complicaciones, a largo plazo pueden presentarse secuelas como defectos visuales y auditivos, condiciones respiratorias crónicas, otras enfermedades crónicas, dificultades en el aprendizaje, parálisis cerebral y déficit de atención e hiperactividad.
En cuanto a la madres que tienen un parto prematuro pueden tener también repercusiones sobre su salud, no solo física, sino también emocional.
“En cuanto a su salud física, usualmente se relaciona a condiciones crónicas de salud que podrían haber propiciado el parto prematuro.
En cuanto a su salud emocional, el parto prematuro se considera un factor de riesgo para el desarrollo de depresión posparto, sobre todo en el caso de resultados desfavorables”, argumentó.
Una investigación
La entidad firmó un acuerdo con la Universidad Iberoamericana para realizar una investigación que permita identificar los factores de riesgo de parto prematuro en mujeres afiliadas al régimen contributivo.
