PAMPLONA, España. – Desnudos, cubiertos de sangre, un centenar de miembros de asociaciones de defensa de los animales pertenecientes a Peta y AnimaNaturalis protestaron el sábado en Pamplona (norte) contra los tradicionales encierros de toros durante las fiestas de San Fermín.
La mayoría de los manifestantes estaban cubiertos de sangre artificial, mientras lucían cuernos de bovinos y mostraban pancartas donde proclaman en varias lenguas que «las calles de Pamplona están manchadas de sangre de toros».
En un comunicado las asociaciones indican que «utilizan descargas eléctricas y varillas afiladas antes del encierro» y «a menudo se utilizan descargas eléctricas y varillas afiladas para atormentar a los toros».
Las asociaciones de protección de los animales quieren llamar la atención «porque docenas de toros sufren lesiones mientras los participantes los persiguen, golpean y aterrorizan camino a su eventual muerte en la plaza de toros de la ciudad».
En las fiestas de San Fermin, que se realizarán este año del 6 al 14 de julio y atraen anualmente a centenares de miles de personas provenientes del mundo entero, toros de varios centenares de kilos son soltados detrás de individuos que corren con el tradicional uniforme blanco y la pañoleta roja.
Los toros corren por calles estrechas de la ciudad, que conducen hasta las plazas de toros donde está previsto que los animales sean muertos en corridas durante el día. Según la organización Peta, piden a España poner fin a esta tradición.
El país tiene otras tradiciones taurinas controvertidas como ponerles a los astados un producto inflamable en los cuernos y los animales que resultan quemados al tratar de desembarazarse de las bolas de fuego.