Santo Domingo.-Las autoridades, más que concentrarse en agarrar a los narcotraficantes con “las drogas en las manos” han optado por investigar otras áreas que ellos usan como camuflaje para su distribución, expendio y ventas, y con las cuales pueden garantizar su arresto y posteriormente una mayor sanción.

Fruto de esto es que en los últimos meses los organismos de investigación encabezados por la Procuraduría General de la República lograron destronar a los supuestamente jefes de las tres principales bandas que operaban en el país.

Estos son Winston Rizik Rodríguez, mejor conocido como “El Gallero”, quien guarda prisión en la cárcel de La Vega; el segundo es Pascual Cabrera, que tiene una orden de captura internacional a través de la Interpol (de acuerdo a las investigaciones de las autoridades Cabrera es el “archienemigo” de Rizik).

Otro elemento que destacó es el caso del Pascual Cordero Martínez “El “Chino”, que está prófugo, también es buscado, y es una de las prioridades de las autoridades criollas.

Francisco Domínguez Brito manifestó que en estos momentos se lleva probablemente la lucha más fuerte de las últimas décadas contra los carteles de la droga.

Comparó casos anteriores, como los del excapitán Quirino Ernesto Paulino y José Figueroa Agosto, que no son tan grandes como los de Rizik, Cabrera y Cordero, quienes a su entender son más peligrosos.

Un aspecto en común que tienen todos es que tenían grandes conexiones con sectores militares, políticos y de poder. Con relación a las “grandes conexiones que tienen los narcos“ con militares y politicos, aseguró que trabajan para “desmontar su conexión”. Instó a que se debe luchar por la institucionalidad de los órganos investigativos, como son la DNCD, Policía, jueces y cuerpos primarios que están ligados a la persecución.

Evaden el sistema 

“Rizik y Cabrera habían logrado evadir todo el sistema de prevención de la República Dominicana, por lo que el Ministerio Público asumió el compromiso de la lucha formal contra el narcotráfico. Sobre todo, contra estas dos grandes bandas que han generado más de cien muertos en conflictos, y lo digo para ser conservador, el conflicto entre ellos por la lucha del poder, de los mecanismos de distribución, de salida de estas drogas”, explicó.

El jefe del Ministerio Público destacó que el organismo enfocó toda su estrategia e investigación no solo en obtener las “drogas en las manos”, sino otros mecanismos para ubicar los bienes adquiridos con el lavado de dinero.

Afirma que de esa forma fue que lograron conseguir el arresto (Risik), y la ratificación de la medida de coerción contra uno de los principales jefes de los carteles en la República Dominicana.

Pascual Cordero Martínez (Chino) es considerado uno de los principales jefes de la distribución de droga en la provincia Santo Domingo y el Distrito Nacional, según explicó el Procurador, pero no necesariamente actúa como Pascual Cabrera y Risik, que muchas de estas drogas iban con destino hacia Europa y los Estados Unidos.

Abogó por la aprobacion de la ley de extinción de dominio, para identificar los bienes de los narcos extraditados. Puso el ejemplo de Cabrera, quien cumplió condena en Puerto Rico por droga y a su llegada al país le devolvieron 35 millones de pesos.

El funcionario habló de este y otros temas durante el Almuerzo Semanal del Grupo de Comunicaciones Corripio.

Villas, caballos y gallos muy caros

El cordinador del Departamento de Antilavado, el procurador Germán Miranda Villalona, dijo que serán tasados varios caballos de paso fino y gallos muy caros, que cuestan desde 25 mil dólares hasta 40 mil, los cuales les fueron decomisados a Winston Rizik Rodríguez “El gallero”, para ser vendidos, ya que son bienes perecederos.

Además, a Rizik como a Pascual Cabrera les incautaron fincas, villas, residencias, casas de veraneo ubicadas en San Cristóbal, Monte Plata y Villa Altagracia, con un costo millonario.

El procurador adjunto Miranda Villalona expresó que se les inmovilizaron todas las cuentas bancarias a los dos supuestos narcos, generadas mediante del trafico de drogas en el país.