2018: razones para la esperanza

2018: razones para la esperanza

2018: razones para la esperanza

Altagracia Suriel

El Año Nuevo es un acontecimiento mundial que conecta con tradiciones favorables a buenos augurios que se expresan en prácticas como los fuegos artificiales, el descorchar el champán, el comer las doce uvas o el bendecir. Un nuevo año alegra, inspira y nos llena de ilusiones.

En sus buenos tiempos, Eduardo Punset afirmaba que “cualquier tiempo pasado fue peor”, predicando un optimismo realista basado en los indetenibles avances científicos y en el progreso material y moral de las pasadas y presentes generaciones que han permitido curar las enfermedades y reducir el hambre, los conflictos y las guerras.

Aunque siempre aparezcan los profetas de la desgracia que pregonan el pesimismo y la fatalidad, en la República Dominicana, en este 2018, tenemos una nueva oportunidad para renovar la esperanza, para pensar que lo mejor está por llegar, tanto a nivel individual como colectivo.

Y tenemos razones para la esperanza:

Crecimiento económico: la Cepal prevé que la economía dominicana crecerá en 5.1 % en 2018. Este crecimiento representa una oportunidad para seguir materializando la prosperidad compartida que nos propone el Banco Mundial y para cerrar brechas, crear empleos, reducir la desigualdad y proteger más y mejor a los excluidos y vulnerables.

Reducción de la pobreza: en los últimos 10 años el país ha reducido la pobreza sostenidamente en más de un 10 por ciento.
La gran esperanza es acabar con la pobreza extrema o la indigencia, lo cual se puede lograr con mayor inversión social, intervenciones concentradas y fortaleciendo la alianza público privada.

Fortalecimiento institucional: hay un compromiso del Gobierno y de la sociedad con la existencia de instituciones públicas eficientes, transparentes y que respondan a las necesidades del ciudadano.

El reto que tenemos es acabar con la duplicidad de funciones y la mejora de la calidad de los servicios, sobre todo los de salud y educación.

Mayor empoderamiento de sociedad: Los medios de comunicación, las iglesias, los movimientos sociales y la ciudadanía en general están más vigilantes de la transparencia y de la ética pública.

Eso es una esperanza para la justicia y el fin de la impunidad.



Etiquetas