Santo Domingo .-El pasado domingo 10 de noviembre, la señora Adelina Ortiz estuvo afectada por un accidente cerebrovascular (ACV), por lo que fue llevada al Hospital General y de Especialidades Mario Tolentino Dipp, donde luego de tres días en el área de emergencia fue llevada a sala y con dos días allí tuvo que ser trasladada a otro centro de salud.
Así lo reveló el pastor Miguel Adames, quien acompañó a su suegra y la familia en el proceso, y tras no recibir las atenciones necesarias por falta de personal médico, indicó se vieron en la necesidad de sacarla en estado crítico.
“El centro no tiene los equipos que requiere un hospital de esa categoría; sólo cuenta con un camillero para atender la alta demanda de los pacientes imposibilitados”, expresó.
Y es que ha pasado un año y tres meses desde que ese hospital abriera sus puertas, con una inversión de 2,800 millones de pesos, a la población de Santo Domingo Norte, pero varios pacientes se quejan de la atención recibida, mientras otros valoran el servicio ofrecido.
La historia de Virginia Herrera, residente en La Javilla, en Santo Domingo, es similar. Fue hace cuatro meses al hospital en busca de asistencia porque se le “disparó la presión”.
Al ser atendida, precisó que la médico general le explicó que había detectado un problema, el cual tenía que ser tratado de emergencia, ya que anteriormente le habían dado preinfartos.
Sin embargo, al comunicarse con el especialista en cardiología, este le indicó que tenía muchos pacientes por atender y no podría verla en ese momento.
Herrera manifestó que se dirigió de urgencia a otro lugar, donde fue intervenida y se ha quedado dándole seguimiento a su presión arterial alta.
Adames dijo que, “a pesar de las precariedades, el director Miguel Ángel Guzmán, hace lo que está a su alcance, sin presupuesto, y sin la cantidad del personal para lograr brindar el servicio de calidad que requiere el moderno centro de salud, al menos en apariencia”.
Más personal
— Quejas
Como algunos usuarios manifestaron que se cuenta con algunos equipos y no con el personal necesario para operar, reporteros de EL DÍA, esperaron por más de una hora para conversar con el director, pero no fue posible.
Usuarios se desplazan desde interior del país
Servicio. No todas las vivencias en el Hospital Mario Tolentino Dipp son negativas, pues hay pacientes como Lucila Minyety, de San José de Ocoa, y Leonida Jiménez, de Yamasá, Monte Plata, que se desplazan varios kilómetros por considerar que las atenciones y el trato son de calidad.
Jiménez sufrió un ACV hace 10 meses y desde entonces, su hija la acompaña a las citas, pero deben madrugar para estar antes de las 8:00 de la mañana para conseguir un turno.
Tanto en la sala de espera para consultas como en la emergencia del hospital la llegada de pacientes era constante.