Washington.-El presidente estadounidense Barack Obama solicitó una partida total de 8,800 millones de dólares para combatir al grupo Estado Islámico en Irak y Siria, en su proyecto de presupuesto para el ejercicio 2016 anunciado ayer.
Para el año fiscal 2016, que se inicia el 1 de octubre de 2015, la Casa Blanca busca llevar a 585,000 millones los gastos militares, un alza de 38,000 millones en relación al ejercicio anterior.
El presidente Obama, presentó un presupuesto de casi 4 billones de dólares, menos austero que los anteriores, particularmente en defensa, y con aumentos fiscales para los más ricos y las corporaciones rechazados de antemano por los republicanos.
“Quiero trabajar con el Congreso para reemplazar la austeridad sin sentido con inversiones inteligentes que fortalezcan a Estados Unidos. Y podemos hacerlo de una forma fiscalmente responsable”, afirmó Obama en un breve discurso desde la sede del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), en Washington.
Las dos cámaras del Congreso y ya han expresado su oposición al plan del presidente.
Para el Pentágono, el presidente solicita 585.300 millones de dólares, un 4 por ciento más que en el ejercicio actual.
En conjunto, la propuesta de Obama representa un aumento del gasto público del 7 por ciento sobre los niveles fijados por los recortes automáticos, conocidos como “secuestro”, que entraron en vigor en marzo de 2013 para reducir el déficit.
“Desde mi llegada a la Casa Blanca, hemos reducido nuestros déficit en unos dos tercios”, enfatizó el mandatario, para quien “la economía va bien” y, por tanto, Estados Unidos no puede darse el lujo de no invertir en campos como la infraestructura, la salud y la educación.
El plan presupuestario se financiará “completamente” a través de “una combinación de recortes de gasto inteligentes y reformas fiscales”. Obama persigue, desde hace años, una reforma tributaria que permita “cerrar lagunas fiscales”.