Definitivamente, la generación del “ojitos galanos” es dura, pónganle el ojo, porque se acaba de anotar “un virao” que era impensable hasta hace pocos años: tumbarle el pulso al doctor Matos Berrido…

Y es que el titular periodístico dice: “reeligen a Matos Berrido a unanimidad”, pero, y aquí está el bendito pero, la cosa no es tan simple, porque una cosa es la publicidad, pero otra muy diferente es LA REALIDAD…

Y la realidad es que a Matos Berrido le amarraron la mano derecha, que era con la que firmaba sus decisiones que noqueaban a cualquiera…

Otra es que es verdad que lo dejaron en la presidencia, pero no es menos cierto que le pusieron fecha de vencimiento a su mandato, que parecía eterno: “¡un período más y te vas!”.. Ah, ya no hay unanimidad en torno a su figura: no puede tomar medidas unilaterales…

¿Y por qué no lo dicen?… Por que lo que está pasando ahora fue que cuando el grupo del “ojitos galanos” entró al circuito voceó frente al Quisqueya “¡llegan los montros men!”… Ahora bien, como digo una cosa digo la otra:

El doctor Matos Berrido, cuando le toque, debe irse muy orgulloso, con la frente bien en alto, porque le dio personalidad a la Liga, su sorteo de novatos le dio equilibrio, fue él quien con su accionar le quitó la imagen de pordiosero al torneo, ya no le piden al Gobierno, ya todos los equipos tienen chance, ya no tienen que salir a buscar “retrojos” por las otras ligas para los playoffs, porque creó un draft que les permite fortalecerse…

Doctor, váyase en paz en el 17, que lo hizo bien!