Una visita halagüeña

Una visita halagüeña

Una visita halagüeña

Cuba se convirtió en el escenario idóneo para que el papa Francisco enviara un mensaje con alcance continental. Se trata de uno de los países que tiene una gran incidencia en importantes puntos de la agenda política y diplomática de la región.

El papel que juega Cuba con el proceso de acercamiento diplomático con Estados Unidos y las negociaciones de paz que juega, en su condición de nación neutral, con Colombia y las guerrillas de ese país, no podían pasar desapercibidas por el papa Francisco.

De manera que tanto la misa multitudinaria, en la Plaza de la Revolución, como los encuentros y acercamientos a líderes de la nación y países del continente, sirvieron para valorar el papel moral y el gran alcance que tiene la palabra del Pontífice.

Una vez más el mundo puede ver en las palabras de Francisco el nuevo camino por el que quiere guiar a los cristianos.

En su homilía improvisada defendió el papel de austeridad y amor que debe jugar la Iglesia; y recordó: “Nuestra santa madre Iglesia es pobre, Dios la quiere pobre, como quiso pobre a nuestra santa madre María”.



Etiquetas

Noticias Relacionadas