Hemos sentido un gran pesar por la tragedia registrada ayer en el sector de Villas Agrícolas, tras registrarse una estruendosa explosión en una industria ícono de esa zona como lo es Polyplas.

Varias personas murieron y decenas resultaron heridas, además de los cuantiosos daños materiales producidos en la industria misma y en los alrededores.

Las autoridades de socorro, con el Cuerpo de Bomberos del Distrito Nacional a la cabeza, realizaron una encomiable labor de rescate de víctimas y para sofocar el incendio producido por la explosión.

El personal médico de los centros donde fueron llevados los lesionados se emplearon a fondo para darles atención rápida y adecuada a los pacientes.

Pero hay un profundo sentimiento de dolor que se ha expandido por todo el país.

Los propietarios de Polyplas, una empresa que ha crecido junto con el sector donde se instaló hace más de 50 años, sufren la angustia del daño sufrido por sus colaboradores y vecinos.

Tienen el enorme reto de reconstruir lo que se pueda reconstruir y levantarse con el vigor que siempre han mostrado, muy a pesar del enorme dolor por las pérdidas humanas.