Solo Balaguer mantuvo unidos a los reformistas aún en la oposición

Solo Balaguer mantuvo unidos a los reformistas aún en la oposición

Solo Balaguer mantuvo unidos a los reformistas aún en la oposición

Santo Domingo.-Contrario a lo que ocurre hoy con sus herederos políticos, quienes ni siquiera se ponen de acuerdo sobre si ir solos o no a las elecciones de 2012, el doctor Joaquín Balaguer mantuvo unido al Partido Reformista y tras dos derrotas consecutivas (1978, 1982) recuperó el poder en 1986 y lo convirtió en la principal fuerza política.

En las elecciones de mayo de 1978 la oposición política a la “dictadura ilustrada” del doctor Joaquín Balaguer y su Partido Reformista canalizó sus ansias de cambio a través de la boleta del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y su candidato, el terrateniente santiagués Antonio Guzmán Fernández. Un torrente de votos blancos obligó al viejo zorro a entregar “la silla de alfileres”.

Tras el cambio de gobierno, miles de exiliados retornaron al país y cientos de presos políticos recobraron su libertad gracias a una amnistía.

El presidente Guzmán Fernández removió de un tiro la cúpula de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional. Se iniciaba la transición a la democracia.

Control desde la oposición

Sin embargo, el partido del gallo colorao y su caudillo seguirían gravitando en el panorama político como la segunda fuerza, con una vasta representación en el Congreso y los ayuntamientos.

Antes de aceptar su derrota, Balaguer le arrebató al PRD varias senadurías con lo que  aseguró  que el Reformista siguiera controlando el Senado, y por ende la  Justicia,  garantizando impunidad para él y sus acólitos. Se recuerda que durante el llamado período de los 12 años la corrupción llegó a niveles tales que el propio Balaguer llegó a decir: “La corrupción se detiene en la puerta de mi despacho”.

En efecto, el caudillo de Navarrete no acumuló grandes riquezas, pero sí muchos de sus funcionarios y jerarcas militares de la época. Balaguer dijo en uno de sus discursos que durante su gestión de 12 años en el país se hicieron 300 nuevos millonarios.

Precisamente apoyado  en los nuevos ricos (civiles y militares) surgidos en su régimen, además del apoyo tradicional de los sectores oligárquicos y su influencia en el campesinado y los sectores más tradicionales, los reformistas se dedicarían a ejercer su nuevo papel: el de partido de oposición. No obstante, la mayoría de las veces el expresidente parecía preferir un bajo perfil.

De PR a PRSC

Tras pactar una alianza con el Partido Revolucionario Social Cristiano, el Reformista, con Balaguer a la cabeza, decidió adoptar la doctrina Social Cristiana y en una convención celebrada durante los días 27 y 28 de marzo de 1982 adoptó de manera expresa la nueva doctrina y algún tiempo después pasó a ser Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), nombre que aún conserva.

Pero en esencia, Balaguer seguía siendo ley, batuta y constitución de la organización y fueron pocos los que se enteraron de la nueva filosofía del partido y por eso siempre se hacía “lo que diga Balaguer”.

Oposición a Jorge Blanco

Candidato sempiterno, Balaguer fue postulado nuevamente por el Reformista en las  elecciones del 16 de mayo de 1982, pero volvió a ser vencido por el PRD  que esta vez llevó como candidato al abogado Salvador Jorge Blanco, que logró el 46.7% de los votos contra 39.2% de los coloraos.

Jorge Blanco realizó un gobierno democrático y respetó los derechos y libertades fundamentales, en sentido general. Sin embargo, ordenó reprimir las protestas populares de abril de 1984 provocadas tras los severos ajustes impuestos por el Fondo Monetario Internacional.

Balaguer apoyó las protestas y encabezó la oposición al gobierno jorgeblanquista agobiado por la impopularidad del ajuste económico, los escándalos de corrupción y los conflictos internos en el PRD.

En ese escenario se celebraron las elecciones generales del 16 de mayo de 1986, donde  el doctor Balaguer resultó ganador con el  41,4 por ciento de los sufragios.

Un nuevo estilo

El 16 de agosto de 1986, Balaguer asumió la Presidencia de la República por quinta ocasión, con un estilo de gobierno distinto al de los 12 años.

Promovió un juicio contra el expresidente Jorge Blanco y varios de sus colaboradores por presuntos actos de corrupción.

Con más de 80 años, ciego y con dificultades motoras, Balaguer mantuvo  su lucidez y controlaba a su modo tanto la cosa pública como la estructura partidaria.

Impulsó nuevamente la construcción de obras y contribuyó a reducir el desempleo.

Elecciones de 1990

En medio de una crisis económica mundial, y tras unos comicios cuestionados por la oposición, el presidente Balaguer se impuso al PLD y al profesor Juan Bosch, así como a José Francisco Peña  Gómez y el PRD. Balaguer sacó el 35.2% de los votos. Bosch denunció haber sido víctima de un “fraude colosal”.

El fin de la dinastía

En  1994 Balaguer se aferra nuevamente a la Presidencia y es declarado ganador, pero esta vez la oposición encabezada por Peña Gómez alegó fraude, auspició protestas en el país y denuncias internacionales. Mediante la firma del “Pacto por la democracia” Balaguer se comprometió a recortar su período a dos años y convocar a   comicios adelantados en 1996.

La dinastía de Balaguer y el Partido Reformista iniciaba su declive.



Etiquetas