Días atrá mi intención era compartir con ustedes los hábitos validados a lo largo de mi camino. El primero de estos lo vamos a llamar Claridad de Propósito

Un emprendedor tiene que saber qué es lo que quiere. La decisión de convertirse en emprendedor puede ser el propósito inicial, pero este deberá evolucionar hacia áreas de enfoque específicas.

“Quiero ser mi propio jefe” es una expresión que no pone con claridad lo que infiere convertirse en emprendedor.

Cuando emprendes no solo tienes un jefe, sino muchos: sobre todo los clientes. Así pues el primer hábito que debe incorporar quien decide entrar a este fascinante mundo es acostumbrarse a poner claridad en sus objetivos. Trascender del umbral de las ideas toma mucha disciplina. Abrir un tema y cerrarlo.

Definir cuál es el paso que sigue y no parar hasta completarlo. Aprendí esta lección con éxitos y con fracasos cuando me inicié.

Hoy quiero comentarles sobre cómo la idea de Domino’s Pizza trascendió: tenía 26 años cuando leí un artículo de la revista Newsweek (en aquellos días no había internet ) donde se hablaba de esta cadena de pizzerías. Me pareció muy interesante y decidí perseguirlo.

Escribí varias veces durante dos años sin ninguna respuesta. Cambié la estrategia a llamadas telefónicas y así pude conseguir que me recibieran en sus oficinas en Michigan, donde en 45 minutos me preguntaron dónde estaba la República Dominicana (en serio) y me dijeron que por ahora no estaban interesados.

Créanme que cada mes llamaba a esta persona, hasta que un año después de mi visita me llamaron ellos a mí y me dijeron que el proyecto para abrir en otro país se había pospuesto y que pudiera haber posibilidades de iniciar en República Dominicana (ya les había explicado dónde estaba), pero que en este punto solo aprobarían países que se comprometieran a abrir 10 locales. ¿Cuántos quieres abrir tú? Sin pensarlo dos veces la respuesta fue fácil: quiero abrir 10 locales…

Pude abrir el primer local en marzo de 1993, más de cuatro años después de que escribí la primera carta. Si bien toda historia será distinta y cada aventura particular, mi experiencia es que debemos ser persistentes y no desanimarnos por las dificultades.

Es un camino, y cada camino nos indicará dónde girar o dónde parar por un tiempo. Algunas oportunidades tomarán forma en pocos meses, otras pueden tomar años… La diferencia es la Claridad de Propósito.

*Por  Ramón Sánchez