Moscú.-El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, aseguró ayer que Rusia y Filipinas se encuentran a punto de cerrar un acuerdo de cooperación en materia militar y de armamento.

“Por supuesto, una serie de documentos aún se encuentran en su fase final de elaboración, incluido en materia de cooperación militar y de armamento”, dijo Lavrov al inicio de las negociaciones con su colega filipino, Alan Peter Cayetano.

Ambos gobiernos ya firmaron la víspera varios acuerdos de cooperación, incluido uno en materia de defensa y otro de energía nuclear.

Fuentes del sector informaron de que Moscú está dispuesta a suministrar a Manila armamento y equipos militares para combatir a la guerrilla yihadista.

De hecho, a la parte filipina se le presentó la producción del consorcio Kaláshnikov -armas ligeras-, helicópteros Mi-17 y Mi-35, lanchas rápidas y sistemas de defensa costera, entre otros.

“Se está estudiando el asunto de la creación de la base normativa y jurídica para la cooperación ruso-filipina militar y de armamento”, apuntó.

En víspera de su visita a Rusia, que tuvo que recortar por la ofensiva yihadista en la isla de Mindanao, el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, aseguró que se proponía persuadir al jefe del Kremlin, Vladímir Putin, para que le suministrara armamento.

“Creo que tendré que persuadir al presidente Putin para que Rusia nos suministre dicho armamento. No se trata de gran cantidad de armas, sino, en concreto, de misiles de alta precisión”, dijo.

Duterte subrayó que no sólo el armamento de alta precisión ruso es mejor que el estadounidense, sino que los rusos “son generosos y están dispuestos a ayudar”.

“Combatimos contra rebeldes, los mismos que había antes en Rusia. Son bandidos no muy numerosos, pero que causan caos. No siempre se necesita armamento pesado para combatirlos, pero sí armas de alta precisión”, dijo.