Santo Domingo.-El presidente de la Junta Central Electoral, Roberto Rosario, reiteró que ese organismo electoral está obligado a garantizar en el país unas elecciones transparentes y equitativas.

“Por esta razón estamos obligados a garantizar que cada voto cuente y llegue a su destino, y de esta manera evitar la inestabilidad y la volatilidad política, que produce incertidumbre, desaceleración en la economía y disminución en la inversión productiva, con todas sus secuelas negativas hacia la población”.

Al participar como el principal orador del almuerzo mensual que realiza la Cámara Americana de Comercio, Rosario expresó que la actual gestión de la JCE se ha ocupado de transformarla en una institución de servicios públicos, con capacidad de gerenciar las funciones puestas a su cargo, con eficiencia y transparencia.

“Ha modernizado la administración del Registro Civil, e igualmente la cédula de identidad y el Registro Electoral”, dijo.

En su disertación con el tema “ La integridad electoral como un componente de desarrollo económico”, Rosario aprovechó el escenario para hacer una reflexión sobre que el Congreso que se instalará el 16 de agosto se aboque a una revisión profunda de la Ley Electoral y a conocer la ley de partidos.

Así como la transformación de todo el aparato político en sus estructuras para aportar mayor equidad, seguridad e igualdad; y con ello una economía de mercado con más vocación humanista.

En otro orden, el presidente de la Junta aclaró que no tiene enemistad con el embajador de los Estados Unidos, James (Wally) Brewster, y su esposo, sino que en algún momento han tenido diferencias en varios aspectos y criterios en torno al manejo de las funciones de ese órgano electoral.

OEA con pocos recursos

El presidente de la Junta reveló ayer que la Organización de Estados Americanos (OEA) le informó que solo ha recibido aportes por 50 mil dólares para los trabajos de observación electoral en el país, cantidad insuficiente para ejecutar los trabajos en la magnitud que le solicitó la JCE.

Dijo que por esa razón el organismo electoral decidió contratar una firma externa para auditar el funcionamiento de los equipos que se utilizarán durante los comicios.

Las misiones de observación de la OEA se ejecutan con donaciones de los países miembros, en especial Estados Unidos y Canadá.