En la actividad pública con mucha frecuencia se encontrarán los siguientes tipos de personas:
Quienes buscan dinero para tener poder.

Los que buscan poder para obtener dinero.

Aquellos que solo buscan poder.

Quienes únicamente buscan dinero.

Los que no buscan dinero ni poder, pero que asumen posiciones tan atractivas que logran captar poder, lo usan para potenciar sus posiciones.

Están también los que no tienen poder ni dinero y por sus posiciones o creencias moldeables son solo instrumentos para dar poder a otros.

El Poder, como se puede ver, se consigue por diversas vías, pero en la actualidad se pierde con facilidad, también por causas diversas.

El columnista de EL DÍA, José Mármol, se ha ocupado en llamar la atención sobre cómo no han sido los filósofos o los sociólogos quienes han reflexionado con mayor acierto sobre el poder.

La explicación es difícil, pero se puede decir fácil: los políticos están tan ocupados en buscar y preservar el poder que suelen descuidar los análisis de cómo este se pierde.

Conocer lo que motiva a cada actor en la camarilla de poder es una buena herramienta.