Santo Domingo.-La Cámara de Diputados envió ayer al Poder Ejecutivo la ley del Código Penal en la que está contenido el texto alterno que se aprobó en ese hemiciclo para acoger las observaciones hechas por el presidente de la República a los artículos que penalizan el aborto.

La información la ofreció Abel Martínez Durán, presidente de la Cámara Baja, quien dijo a través de la red social Twitter que la nueva legislación fue recibida por el Ejecutivo junto a una comunicación que le remitieron.

En la carta enviada por Martínez Durán se indica que el texto aprobado por los diputados recoge las inquietudes del Mandatario, quien pidió que se respetara el derecho a la vida de la mujer embarazada, su integridad psíquica y moral, así como la “seguridad jurídica” de quienes asisten los partos.

Ayer varios juristas y legisladores advirtieron que las observaciones debían ser conocidas por el Senado de la República, ya que el Congreso dominicano es bicameral.

En ese sentido, el abogado constitucionalista Cristóbal Rodríguez sugirió al Presidente de la República no promulgar la pieza y remitirla al Senado, para que la misma no sea inconstitucional.

Preocupación por proceso

La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) calificó como preocupante la forma en que los diputados aprobaron las observaciones hechas por el Presidente al Código Penal en relación al tema del aborto, así como la decisión de la Cámara Baja de enviar el texto aprobado directamente al Poder Ejecutivo, sin pasar por el Senado.

“En lo concerniente al primer punto, es pertinente resaltar que en el procedimiento llevado a cabo en la Cámara Baja se suscitaron una serie de irregularidades contrarias al reglamento de dicho órgano, que afectan su institucionalidad y transparencia”, dijo Servio Tulio Castaños Guzmán, vicepresidente ejecutivo de Finjus.

Recordó que durante la sesión del día 2 de diciembre del presente año se designó a la Comisión Permanente de Justicia para que conociera de las observaciones al Código Penal, acorde con el reglamento de la Cámara de Diputados, y dicha Comisión “nunca rindió su informe sobre el tema”.

En segundo lugar, explicó que el reglamento manda a que cuando el presidente de la Cámara sea el autor de un proyecto o tomare parte en las discusiones, su puesto sea temporalmente ocupado por la vicepresidenta, y de igual forma estipula que cuando alguno de los diputados reclamare contra cualquiera de los actos o disposiciones del presidente, este deberá tomar inmediatamente la opinión del Pleno”. Sin embargo, dijo que ninguna de esas reglas fue acatada.

“Llama la atención que se conociera en una misma votación tanto la aprobación de las observaciones como la propuesta de redacción de los artículos observados, cuando ambos constituyen dos procedimientos distintos que ameritaban votaciones separadas”, refirió Castaños Guzmán.

Analizan posibles aportes

De su lado, la Comisión de Género de la Cámara de Diputados evaluó ayer la contribución que podría hacer ese órgano para la conformación de ley especial que regiría los abortos por violación, incesto o mal formaciones, proceso que fue incluido en el párrafo del artículo 110 del Código Penal aprobado.

Episcopado opuesto a párrafo

La Conferencia del Episcopado manifestó ayer su respaldo a las observaciones del Poder Ejecutivo al Código Penal que fueron aprobadas por la Cámara de Diputados junto a un texto alterno, pero rechazó el párrafo del artículo 110 que abre la posibilidad de que en un futuro el aborto producto de violación, incesto o malformaciones del feto se haga sin ser penalizado.

“En cuanto al artículo 110 incluido en el Código Penal podemos afirmar que acoge nuestra posición, ya que respeta el principio de agotar todos los recursos disponibles para salvar la vida de la madre y de la criatura.

El posible efecto negativo de la interrupción del embarazo sería una consecuencia indirecta”, informó el organismo católico.

El rechazo de los religiosos recae en el párrafo de ese artículo que ordena redactar una ley para despenalizar los abortos cuando el embarazo sea producto de una violación, incesto o malformaciones.