El Banco Mundial tiene algunas ideas novedosas para las remesas de dinero que llegan a India, China, Filipinas, México y Nigeria: construir infraestructura.
El dinero enviado a sus países por los ciudadanos que trabajan en el exterior como ingenieros, maestros, enfermeros, marineros o personal doméstico llegaron a unos US$583,000 millones el año pasado, según el Banco Mundial.
De eso, India recibió US$70,000 millones, China US$64,000 millones y Filipinas US$28,000 millones. Y esos son sólo los flujos oficiales.
Hay planes en dichos países de usar el dinero que genera las remesas en obras de infraestructura.