Padres  deben inculcar don agradecimiento

Padres  deben inculcar don agradecimiento

Padres  deben inculcar don agradecimiento

Santo Domingo.-Agradecer es una virtud que solamente las personas humildes de corazón pueden desarrollar.

La actitud de personas que no saben agradecer puede tener su origen en la etapa familiar en que les tocó nacer  o el lugar de nacimiento entre los hermanos, o en la relación que se forjó con las personas significativas de su entorno familiar.

Aunque todos pertenezcamos a una familia, no todos nacemos en la misma familia.

Las familias van cambiando a medida que van caminando como proyecto, y cada vez que nace un hijo, pues papá y mamá han tenido una evolución, ya sea económica, laboral, personal, o en su defecto, tienen más edad, explica el psicólogo Ramón Almánzar, del Centro Vida y Familia, quien tiene un fin de semana para solteros del 27 al 29 de septiembre.

“La manera en que hagan sentir a un hijo en específico, sin enseñarle que ocupa  un lugar entre muchos lugares, puede  crear o no la habilidad en esa persona de saber agradecer y reconocer los méritos de otra persona”, dijo.

 Error en la crianza

Almánzar explicó que si no ocurre de esa manera, y en cambio le dan todo cuanto quiera el hijo y más de ahí,   este  no tendrá un sentido claro del valor de las cosas, y estará caminando por la vida entendiendo que todo el mundo debe rendirle honor, y que merece todo de todos.

El experto manifestó que muchos padres y madres tienen grandes ilusiones con el primer hijo, y partiendo de esto  le ponen todo en bandeja de plata, para ver realizado en él   el anhelo que como padres tienen sobre su primogénito, lo que puede generar un sentimiento de “principado emocional” en esta persona, y que luego entienda que todo ser humano que existe en el mundo es un peón que está para rendirse a sus pies.

Cuidar sus emociones

Almánzar, quien es terapeuta de pareja, de familia y sexólogo, destacó que en otro caso muy particular, podría suceder que uno de los progenitores, o ambos, proyecten en un hijo o hija los temas que ellos como adultos no han sabido manejar en su vida, y dependiendo de esto  se va creando otra gama de esquemas emocionales y mentales en torno a la relación significativa de este hijo con su progenitor.

Dijo que  una mamá sobreprotectora, que vive obsesivamente encima de su hijo o hija menor, puede generar el mismo sentimiento de “principado emocional” en esta persona, que luego entenderá que todas las personas deben cuidarlas porque ellos son el ser más importante y merecedor de cuidado sobre la tierra.

Estos ejemplos  generan a su vez lo que es un alto grado de merecimiento, y en consecuencia   mal agradecimiento a todas las personas que le rodean.

“Por tal razón, tenemos que ser agradecidos con todos, incluso con aquellas personas, que aun haciéndonos daño, nos enseñan a ser fuertes”, concluyó.   



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