A Wirfin Obispo le gusta jugar y no quedarse tranquilo, luego de que sus Estrellas Orientales fueron descalificadas para participar en la postemporada invernal 2016-17.

Por eso se puso a disposición para el sorteo de nativos, presto a lanzar en el Round Robin y se muestra contento de ser seleccionado por los Tigres del Licey, al que ayudó a ganar su partido de la primera fecha con trabajo de dos tercios de entrada (0.2) en situación de apremio.

“No me gusta quedarme en mi casa, me gusta jugar y gracias a Dios que el Licey me ha dado la oportunidad y aquí estamos para batallar y ayudar al equipo en lo que pueda”, afirmó Obispo.

Manifestó que desde su llegada al conjunto azul los jugadores y el coach de picheo, Wellington Cepeda, le dieron un buen recibimiento y se siente muy bien de estar en el equipo.