Los Juegos Nacionales Escolares es el proyecto más importante que se ha implementado en los últimos años, por lo que hay que prestarles la debida atención en todos los aspectos.

En los centros docentes es donde nacen las futuras estrellas.

Esta es una inversión económica, que por cierto debe ser bastante elevada por el número de atletas envueltos, que debe preservarse con la supervisión estricta de las autoridades envueltas, en este caso los ministerios de Educación y Deportes.

Pero hay que darle su espacio al Instituto Nacional de Educación Física, que aunque con menos jerarquía, es el que debe asumir la supervisión permanente de los atletas con proyección de escalar más peldaños.

No hay duda que el Inefi no ha estado ejerciendo a plenitud sus funciones.

Este es un proyecto que no debe tener reversa, hay que inyectarle todo el entusiasmo para que cada vez haya más motivación de participación .

La antorcha recorre todo el país como parte de la promoción del evento.

No se puede cejar ni dar un paso atrás ni para coger impulso, porque de lo contrario se apagará el entusiasmo de los estudiantes, y eso sería fatídico.