Debble Stevens no olvidará el día en el que decidió donarle uno de sus riñones a su jefa. En vez de estarle agradecida por ese gesto, la despidió por no asistir al trabajo por la recuperación de la cirugía.
Debble necesitó estar recuperación varios días , algo que su jefa no entendía.
“ ¿Por qué no estás en el trabajo? . La gente va a pensar que te trato de forma especial”, le explicaba Brucia.