Santo Domingo.-Una profunda muestra de solidaridad dieron ayer colegas, personalidades y amigos a los familiares del veterano periodista Leo Hernández, quien murió el sábado y es velado en la Funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln.

La Pipigua, como era conocido entre sus allegados, murió la noche del sábado de un infarto cardíaco, mientras miraba televisión y sintió un malestar que obligó a trasladarlo de inmediato al Centro Médico Dominicano, donde llegó sin vida. Sus restos serán sepultados hoy en el Cementerio Cristo Redentor a las 11:00 de la mañana.

A Hernández, de una larga trayectoria profesional de 43 años, y era columnista del periódico El Caribe y fue relacionista público de 14 instituciones del Estado, le sobreviven su esposa, la también periodista Margarita Quiroz, sus hijos Jhonattan, Lee, Leo Junior, León, Leíto, Elio, Gretcher, Leandra, Fénix, Leonela, Rommy, Lianel, Leo y Sarah Leonor; hermanos Vidalina y Willy, nietos y demás familiares.

Lamentación

Olivo De León, presidente del Colegio Dominicano de Periodistas, así como Mercedes Castillo, expresidenta de ese gremio, exprearon pesar por su partida.

La mayoría de colegas lo definieron como un hombre integro.