Monseñor Nouel.-Residentes del sector  Los Platanitos de Bonao temen que el río Yuna se desborde  y penetre a las casas de las  más de 800 familias que residen en esa zona.

Explicaron que las lluvias caídas en los últimos días, a consecuencia del paso por el país del huracán Irene, hicieron elevar el caudal del afluente desde tempranas horas de la madrugada de ayer, por lo cual se mantienen vigilantes ante cualquier amenaza de inundación.

“Estamos despiertos desde las tres de la mañana chequeando el río, con miedo a que se entre para el pueblo, porque ya lo ha hecho”, dijo a EL DÍA Leydi Amparo González.

Wilson Durán, Brenda Restituyo Sánchez, Yonny Alcántara y otros moradores del poblado se quejaron de que el riesgo de inundación es más grave porque desde hace unos dos meses las aguas del río Yuna fueron desviadas hacia una zona más cercana a la comunidad por técnicos de la Oficina Supervisora de Obras del Estado, como parte de los trabajos de reparación del  puente Yuna.

“Ellos saben que el río crece y se ha llevado todo esto, no tenían que desviarlo porque ahora está más cerca de la gente”, reclamó Yonny Alcántara.

Señalaron que hace cerca de cuatro meses iniciaron la rehabilitación del viaducto, pero no lo avanzan, y que sólo se aparecen cuando hay temor de desborde.

Manifestaron que  los constructores colocaron unos gaviones (contenedores de piedras retenidas con mallas de alambre) que no son los adecuados para retener el nivel afluente.

“Mira lo bajo que están (los gaviones), si llueve en la cabecera, donde se junta con el río Masipedro, el río se va a meter para acá (el pueblo)” ,  advirtió González.

Sobre los organismos de emergencia dijeron que sólo  miembros de la Defensa Civil estuvieron en el lugar y  recomendaron  a los residentes abandonar sus hogares si las aguas ofrecen peligro.

Las lluvias afectaron la agricultura

Las lluvias provocadas por el paso del huracán Irene afectaron plantaciones de plátano, cacao, arroz y café en las ocho  regionales en que está divida la estructura operativa  del Ministerio de Agricultura.

Un reporte de esa entidad señala  que  en el norte  las inundaciones afectaron las plantaciones de plátano,  café y cacao. En el noroeste (en  Laguna Salada, Mao y Esperanza) se ahogaron las de arroz, al igual que en el  nordeste (sobre todo en Nagua) y  el Bajo Yuna.

En Higüey   resultaron inundadas mil 200 tareas cultivadas de arroz.