El croata Iván Ljubicic se alzó ayer con la victoria en Indian Wells, el primer Masters 1000 de su carrera, un logro que no imaginaba conseguir cuando comenzó el campeonato y que supone un plus de motivación para seguir luchando a sus 31 años.
Ya era hora de ganar uno, dijo entre risas el actual número 26 del mundo, que a partir de la próxima semana asciende hasta el puesto 13 del ránking ATP.
Si me fijaba en mi trayectoria sentía que echaba en falta esto, dijo.