SANTO DOMINGO.- Legisladores de la oposición y del partido del Gobierno favorecieron ayer que la Cámara de Cuentas intervenga en la situación que se ha presentado en la Junta Central Electoral, donde se han denunciado actos de corrupción.
El diputado perredeista Rafael Calderón apoyó el reclamo de organizaciones empresariales, comerciales y sociales por que se castigue la corrupción.
Charlie Mariotti, senador PLD-Monte Plata, manifestó que la última palabra debe tenerla el organismo fiscalizador.
Otros consideran que el vicepresidente de la Corporación Dominicana de Empresas Estatales (CDEE), Radhamés Segura, debe ser interpelado luego de que admitió que existen más de 40 familiares laborando en su gestión.
Sin embargo, sostienen que en el caso de la CDEEE existe un conflicto de intereses y quieren sacar a Segura porque cuestiona varios contratos onerosos para el Estado.