Las abejas, un ente de equilibrio humano

Santo Domingo.Su gran laboriosidad es incomparable al diminuto tamaño que las caracteriza. Sin embargo, por sus aportes a la humanidad y al planeta, las abejas (Apis melífera) son un ejemplo a imitar entre los himenópteros o insectos.

Aunque no es el único en su clase que vive en sociedad, se destaca por ser un ente de equilibrio, sirviendo de polinizador a las flores de las plantas y con ese proceso hacer que estas paran sus frutos. Viven asociadas y su mundo gira en torno a la colmena que producen constantemente.

Su orden familiar lo encabeza la reina, la que maneja el grupo, mientras que los zánganos (que son los machos) fecundan las hembras.

“Las demás son obreras y guardianes, dentro de las cuales unas se ocupan de la recolección de su alimento, que es el polen de las flores, y otras se encargan de vigilar que la colmena no sea atacada”, detalló Blas Reynoso Salcedo, biólogo y estudioso de la entomología.

Afirma que estos guardianes impiden que otras abejas se roben el polen que colecta el grupo al que pertenecen.

De acuerdo con Nelson García Marcano, biólogo, estas son domesticadas cuando el hombre las confina y cambia algunas de sus características para su aprovechamiento.

Aportan recursos

Ambos expertos coinciden en que estas especies pueden visitar hasta 400 flores por hora y, lo mejor, en base a su labor aportan millones de recursos económicos, porque sin ellas el hombre tendría que emplearse a fondo para jugar su rol .