La violencia asalta las aulas y desnuda males sociales

La violencia asalta las aulas y desnuda males sociales

<P>La violencia asalta las aulas y desnuda males sociales</P>

SANTO DOMINGO.- El tijerazo en el pecho con el que  un adolescente de 14 años mató a su compañero Marcos Ruiz, de 13, en el ambiente escolar “Espacio para crecer”, en Barsequillo, San Cristóbal, no sólo acabó con su  vida, sino con la esperanza de toda una familia.

Pero esta tragedia también puso de manifiesto una vez más la realidad que se vive en muchos de los 5,383 planteles  con que cuenta el sistema escolar dominicano: hacinamiento en las aulas, familias disfuncionales,  alumnos que viven en la extrema pobreza y el trabajo infantil.

El garaje en que  funciona la “escuela” donde estudiaba  Marcos es, asimismo, reflejo de la bajísima inversión del Estado en Educación, menos del 2.6% del Producto Interno Bruto, una de las más bajas de toda Latinoamérica.

 En menos de ocho metros cuadrados reciben clases 70  estudiantes, en dos tandas. Pese a las precariedades, su existencia es una bendición para muchas familias cuyos hijos han sido expulsados de otras escuelas por bajo rendimiento o por inconductas.

Victimario y  víctima a la vez
Como su víctima, el  victimario de Marcos -cuyo nombre omitimos por razones legales- viene de una familia fragmentada.
El padre,  Santiago de la Rosa González, de ascendencia haitiana,  ha procreado 9 hijos, cinco de éstos huérfanos de madre.
El hombre  asumió la crianza de los niños, y luego se “juntó” con otra mujer.

Con dolor,  pide a las autoridades  mantener en Najayo a su hijo, el matador de Marcos.

Dice que el muchacho -ahora prisionero en Najayo- no le ha querido escuchar y por eso le ha ido mal en la escuela.
De la Rosa trabaja como encargado de un control de una ruta de guaguas que va de  la Capital hacia Jimaní. Se autodefine como un hombre serio y trabajador.

El trauma emocional que hoy sufre  es parte de la extensa  secuela que dejan los conflictos y conductas rebeldes de estudiantes que se enfrentan entre sí,  y que en los últimos tiempos han llegado al colmo de querer envenenar a  profesores.

Murió la esperanza…
A  Josefina Ruiz Perdomo, la noticia de la muerte de su hijo le cayó como un rayo en el pecho.
Desde aquel fatídico momento, dice, siente que murió la ilusión de tener un hijo profesional y dejó de tener el apoyo principal con quien levantaba a su familia, compuesta por cuatro hijos más.

La humilde madre soltera, doméstica de oficio, no asimila la ausencia de su vástago  de 13 años, desde el pasado día 19 de este mes.

Y también la alegría
La instructora  Laiza Eugenia Cuello y los compañeros de clases de Marcos no han vuelto a entonar por completo la canción con que iniciaban la rutina de clases de cada día.

A la maestra sólo les surgen interrogantes de aquella horrenda acción que sorprendió a todos en el sector Barsequillo, donde la descomposición familiar y el olvido de las autoridades son caldo de cultivo para  la  violencia que viene arropando no sólo a esta comunidad, sino a toda la sociedad dominicana.

Falta de controles
Para enfrentar la ola de  violencia que ha convertido algunas escuelas en espacios peligrosos, fue necesario crear la  Policía Escolar, pero estos apenas suman 1,020 para controlar una población de 2.2 millones de estudiantes, algunos de los cuales ya se han graduado en la universidad del crimen y la delincuencia.

Casos recientes En San Cristóbal, el pasado viernes, el estudiante Ángel Luis Cepeda Rosario, de 18 años, fue herido en la misma puerta de la escuela por un compañero de apenas 15 años. Recibió cuatro impactos de bala. Actualmente se  debate entre la vida y la muerte.

veneno para la profe En Hato Mayor, una estudiante   de 14 años le dio a tomar un jugo con una sustancia tóxica a una profesora, con la clara intención de matarla.

Apuñalan otro de 14 El día 27 de octubre, en la escuela Rafaela Santaella, en el barrio de Herrera, un  estudiante de 14 años apuñaló a otro de 12, con  una Sevillana.

amenaza DE MUERTE En el barrio Capotillo una profesora sometió a la Justicia a una de sus alumnas del nivel básico porque la amenazó de muerte.

llevan  punzones  En la escuela Fray Ramón Pané, Los Jardines,  un alumno llevó un punzón  para agredir a la directora. Otro   le partió la  cabeza a un compañero de un palo. Dicen en esta escuela hay bandas de ‘naciones’.Era  mal estudiante, pero trabajaba para  ayudar a  mantener su familia

La madre de Marcos Ruiz, de ascendencia haitiana,  en principio residía en Elías Piña, luego en La Vega y desde hace siete años se trasladó a Haina en busca de una mejor vida.

Entre sollozos narró que su hijo le ayudaba a cocinar,  fregar, ordenar la casa y a cuidar de sus cuatro hermanas, mientras ella trabajaba en una casa de familia.

“Yo me siento mal, porque él no estaba enfermo, entonces cuando vinieron los muchachos y me dijeron que Marcos recibió una puñalá con una tijera me sentí muy mal”, comentó desconsolada Josefina del Rosario.

Al igual que ella, su hija Cheril del Rosario, de 16 años, narró que Marcos, quien desertó de la escuela a partir del segundo curso de primaria, chapeaba patios de los vecinos.

A pesar de su corta edad, Marcos  limpiaba jardines cada vez que alguien le solicitaba y con el dinero que le pagaban ayudaba a su madre, quien apenas devenga RD$5 mil  al mes, de los cuales RD$1,200 son para pagar la pieza en que viven.  Los RD$3,800 que le quedan no le alcanzan para la comida del mes.



Etiquetas