El secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, advirtió ayer que cualquier intento de abordar las preocupaciones sobre Irán no debería poner en peligro el acuerdo nuclear que tanto costó lograr, después de que el presidente estadounidense, Donald Trump, exigiera cambios al respecto.

A Estados Unidos le preocupa que el acuerdo, alcanzado tras 12 años de conversaciones, no castigue a Irán por su programa de misiles balísticos, su interferencia en conflictos regionales o sus abusos contra los derechos humanos en el país.

En un comunicado, Guterres dijo que «los asuntos que no están directamente relacionados” con el pacto “deben abordarse sin perjuicio de preservar el acuerdo y sus logros”.

El acuerdo de 2015, conocido como JCPOA por sus siglas en inglés (Joint Comprehensive Plan of Action), es un “logro importante de la no proliferación nuclear y la diplomacia, y ha contribuido a la paz y la seguridad regionales e internacionales”, agregó.

Trump acordó el viernes no aplicar las sanciones relacionadas con la energía nuclear, pero advirtió que era la «última oportunidad» de arreglar el acuerdo con Irán.