La muerte es la situación más deprimente que le sucede al humano, pero lamentablemente, nada ni nadie puede deternerla.
Es como que diría el poeta de Villas Agrícolas: “Si te toca, te toca”.

En los últimos 20 días, cuatro reconocidos comunicadores se han ido para el llamado otro mundo del cual nadie regresa, aunque desde hace siglos se habla de la “resurrección”.

La partida de Roberto -Papito- Lebrón, Pedro Ventura Santana, Mickey Mena y Ricardo Gil ha sido para los comunicadores dominicanos un golpe sin piedad para nadie. No basta con rezar, simplemente, eso no la amilana en nada.

Que nadie se lleve a engaños, la muerte está siempre al acecho, sin favor ni temor para nadie, consciente de que nadie puede vencerla ni a mediano ni corto plazo.

No tiene piedad de nadie cuando le llega la hora, y ni siquiera los políticos dominicanos, que es mucho decir, han podido detenerla, a pesar de que algunos como Lilís y Trujillo creyeron que eran inmortales.

Lebrón, Ventura Santana, Mickey y Ricardo nos dejan para siempre, pero la muerte por mucha fortaleza que tenga, no podrá
hacer que lo olvidemos.